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Junior Alexander Roldán Paredes fue asesinado en Colombia. Lo confirmaron autoridades ecuatorianas.Ilustración MR

Junior Roldán: El extenso y sanguinario legado criminal del segundo líder de Los Choneros

Fue hallado en una zona boscosa del municipio de Fredonia, en Antioquia, Colombia. Lugareños lo habían identificado antes que las autoridades.

El asesinato de Junior Alexander Roldán Paredes, alias JR, fue confirmado el 8 de mayo de 2023 por el comandante general de la Policía Nacional, Fausto Salinas, y también por uno de sus parientes. “Lo mataron en Colombia”, fue el mensaje que despejó la incertidumbre que había en torno a este suceso.

El jefe policial señaló que se trabaja en coordinación con sus pares colombianos para esclarecer este suceso y atrapar a los responsables.

Horas antes, en redes sociales, ya se veían emotivos mensajes de miembros de su agrupación, que hacían alusión a su partida: “Amigo y jefe. Fuiste un caballero y un guerrero (...). Espero siempre se lleve en memoria tus obras delante de Dios (sic). Te admiré en vida por cómo eras y por quién eras”, dice parte de un texto publicado por alguien que decía representar a un grupo denominado Clan 8.5.

Roldán Paredes, considerado el segundo líder de la banda Los Choneros, nació en el cantón El Triunfo, Guayas, el 25 de septiembre de 1984 y su último cumpleaños, el número 38, lo celebró cuando aún estaba en prisión, en el Centro de Privación de Libertad Guayas 4, conocido popularmente cono Cárcel Regional, en Guayaquil.

En ese mismo lugar, el 16 de septiembre de 2021 ocurrió un ataque con drones cargados con explosivos, que fueron lanzados sobre el pabellón donde estaba el capo criminal, quien resultó ileso.

El segundo atentado grave en su contra aconteció en su tierra natal, el 16 de marzo de este 2023, cuando disfrutaba de una noche de billar en compañía de sus adeptos. En esa ocasión, Roldán Paredes pudo evitar la muerte y fue captado por una cámara de seguridad cuando escapaba de la escena.

Desde ese momento, el líder criminal fue calificado como un prófugo de la justicia, porque se despojó del grillete electrónico que permitía a las autoridades conocer su ubicación, como parte de las medidas de prelibertad de las cuales gozaba desde el 14 de febrero. En la última imagen captada del líder chonero, el día de su huida, llevaba una prenda de vestir que lo caracterizaba: una bividí blanca.

Y fue con una indumentaria de estas que la tarde del sábado 6 de mayo unos campesinos del municipio de Fredonia, en el departamento de Antioquia, en Colombia, encontraron un cadáver que había sido lanzado por una ladera. El cuerpo era de un hombre de contextura y características similares a las de Junior Roldán. Pero no fue lo único que llevó a los investigadores a sospechar que se trataría de alias JR.

Con el deceso de JR, el principal líder de Los Choneros, José Adolfo Macías Villamar, alias Fito, tendría que elegir un nuevo subcomandante.

Gustavo Guzmán Maldonado, alcalde de la localidad cafetera, en declaraciones a medios de prensa colombianos informó que la víctima tenía un disparo en el cráneo y que su identidad no había sido confirmada en el lugar de los hechos, porque no había documentos que permitieran hacerlo.

Sin embargo, hubo habitantes de la zona que habrían reconocido al fallecido como “Junior Roldán, un narcotraficante ecuatoriano”, señaló el burgomaestre ‘paisa’ en una entrevista ofrecida el medio de comunicación El Colombiano.

El silencio de su agrupación

Un día antes de que se reportara la presunta muerte de Junior Roldán, circuló un video de un triple crimen, tras lo cual también se lo mencionaba como una de las víctimas. Ante esa situación, los voceros de Los Choneros, en su portal de Facebook JF Entertainment, publicaron de inmediato que se trataba de una información errónea.

Pero esta vez no descartaron ni confirmaron el deceso su líder, lo que aumentó el misterio al respecto.

  • Repercusiones

Antes de que el pariente de JR confirmara su deceso, Kléber Carrión, oficial retirado de la Policía, explicó que Junior Roldán pudo haber viajado a Colombia “por dos motivos: impunidad y seguridad”, porque en Ecuador había una orden de prisión en su contra, y además estaban sus enemigos.

“Podría haber repercusión en las calles. Ya han sido días muy violentos, con muertes muy fuertes. La guerra se iría agravando, con más víctimas colaterales, incluso niños, como ya se ha visto”, plantea el especialista.

  • El procedimiento

César Peña, fiscal especializado, explica que si un ecuatoriano fallece fuera del territorio nacional, las primeras diligencias dependerán de la legislación del país en el que se presente el caso. “Primero hay que verificar los acuerdos internacionales, por ejemplo los que tengamos con Colombia. De ahí, el vecino país tendría que proceder con el trámite de identificación humana, para comprobar si el cuerpo corresponde o no a una determinada personas”, menciona.

Luego, para tener una confirmación más rigurosa, podrían practicarse pruebas genéticas (ADN), pues no se puede descartar que se trate de fingir su muerte, como ya ha ocurrido en el pasado.

Junior Roldán enviaba donaciones a personas de escasos recursos en el cantón El Triunfo, en Guayas.CAPTURA DE VIDEO
  • Temido y amado en su tierra natal

Junior Roldán era una persona temida en el cantón El Triunfo. Tanto así que algunos lo llamaban ‘el innombrable’, de acuerdo con trabajos de investigación realizados por Diario EXTRA.

En la localidad sentían miedo porque a la hora de matar, alias JR no se medía. Para citar un ejemplo, en 2007 acabó a tiros con su cuñada, Diana Reyes Palma, solo porque ella no le quiso decir en qué lugar estaban sus hijos.

Sin embargo, Junior Roldán también tenía otra cara, una más dadivosa, porque cada mes de diciembre hacía que la gente bajo su mando alquilara el estadio de la localidad, para ofrecer shows artísticos, comida y regalos para los niños de su cantón.

También se encargaba de ciertas obras de beneficencia para personas de escasos recursos, a quienes hacía llegar camas, colchones, electrodomésticos, entre otros objetos. Por ese motivo, JR tenía personas que lo amaban y buscaban protegerlo.