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En un cofre donado por las autoridades municipales sepultaron a la madre de familia.miguel laje

¡Despedida en cuatro tablas!

No hubo capilla ardiente ni cortinaje, solo el cadáver en una caja sobre la mesa de comedor. Sus allegados piden que se detenga al presunto asesino.

Por Miguel Laje / Milagro, Guayas

15 de diciembre, 2020

Por miedo a que les pasara algo a sus padres y a sus hijas, Flor del Rocío Valle Altamirano habría soportado los constantes maltratos que recibía por parte de Jimmy Paúl Romero Morán, su pareja y padre de sus tres niñas.

Así lo confirmó la mañana de ayer su hermana menor, Mayra Valle, quien agregó además que el principal sospechoso de este asesinato, supuestamente, se gastaba en drogas el dinero mensual que su ñaña recibía del bono.

“Mi hermana estaba reuniendo su platita para comprarse una lavadora y él llegaba, le pegaba y le quitaba (el dinero) para irse a fumar”, indicó la pariente de la víctima, que fue apuñalada 12 veces después de una discusión, cerca de las 23:30 del sábado, en el sector Santa Beatriz, al norte del cantón Milagro, provincia del Guayas.

VELATORIO

El cuerpo de Flor del Rocío, colocado en una caja de madera donada por las autoridades municipales, yacía sobre una mesa de comedor, en la sala de la casa de un familiar.

Fue un velatorio bastante inusual, sin cortinaje ni capilla ardiente. El féretro tampoco tenía vidrio y el cadáver prácticamente estaba al descubierto.

En este ambiente de tristeza, Jessenia Gómez Coello contuvo sus lágrimas mientras pedía justicia por la muerte de su prima.

Tras el hecho que conmocionó a Milagro, funcionarios de la dirección distrital del MIES acudieron para ofrecer el bono de contingencia y asistencia psicológica a las huérfanas

Ella también reconoce que Flor tuvo una mala vida junto al padre de sus hijas. Afirmó que hace cuatro meses aproximadamente, el tipo casi la apuñala. “Aquí afuera, a mí también casi me mata. Quise defender a mi prima porque le estaba pegando y la amenazaba con un cuchillo y como me metí, casi me asesina”, dijo la mujer.

Esa no sería la primera vez que Romero Morán atentó contra la vida de su pareja. Hace un mes aproximadamente, según lo que les ha dicho la hija de 11 años, tuvieron otra pelea.

La niña y sus hermanas habrían presenciado en más de una ocasión las agresiones de su padre hacia su madre.

El sepelio de la señora fue a las tres de la tarde de ayer en el cementerio general de Milagro.

El sospechoso ‘les dejó el polvo’

Entre los parientes de la fallecida desconocen el paradero del principal sospechoso del crimen. Aunque el domingo, cuando la víctima permaneció en la sala de velación municipal en la calle Vargas Torres, lo habrían visto merodeando la casa donde ocurrió el ataque.

“Lo han visto los vecinos. Ha estado sentado aquí con un sombrero, afuera de mi casa y se ha llevado una ropa de él que teníamos aquí lista para quemar”, expresó Fernando Valle, tío de la fallecida.