“Mi cuñada cree que todo es una pesadilla. No acepta que sus dos hijos estén muertos. Eran jóvenes, llenos de vida, con todo un futuro por delante. Uno estaba trabajando y su hermano menor solo lo acompañaba”, relató Ángel Párraga, tío de los jóvenes hallados muertos dentro de un carro en la calle Junín, entre Córdova y Baquerizo Moreno, en el centro de Guayaquil.

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Párraga explicó que su sobrino mayor, Diego Armando Barahona Villamar, de 22 años, trabajaba en una empresa de servicios de internet. Su jornada había comenzado a las 06:00 del martes y, como debía seguir trabajando hasta tarde, le pidió a su hermano menor que lo acompañara.

El menor de los fallecidos, Sebastián Jordán Párraga Villamar, de 18, estaba a punto de ingresar a la universidad para estudiar Agroindustria. Los cuerpos fueron encontrados a las 07:00 de ayer miércoles por un cuidador de carros.

“No entendemos por qué mi sobrino estaba trabajando solo, y peor aún, de noche y sin luz. Diego le pidió a su hermano que lo acompañara, y su mamá accedió. Se supone que estaban instalando fibra óptica cuando se fue la energía. Al quedarse sin luz, decidieron bajar y meterse en el carro para esperar a que volviera la electricidad. No sabemos exactamente qué sucedió, si se quedaron sin gasolina o qué fue lo que pasó”, manifestó Párraga, aún incrédulo por lo ocurrido.

Diego Armando llevaba dos años trabajando para la empresa, donde fue contratado inicialmente como chofer, pero también realizaba tareas de mantenimiento y soporte técnico.

La familia se enteró de la tragedia a través de una llamada telefónica. La cédula de los jóvenes fue encontrada entre sus pertenencias, lo que permitió identificarlos, contó su tío, mientras esperaba con otros familiares afuera del Laboratorio de Criminalística para recibir los cuerpos de los hermanos.

El teniente coronel Jaime Lara, jefe subrogante del distrito 9 de Octubre, explicó que, según los paramédicos que acudieron al lugar, la causa de la muerte fue asfixia por inhalación de monóxido de carbono, un gas generado por un equipo eléctrico que utilizaban, el cual fue hallado dentro del vehículo.

“Es un carro cerrado, lo que impidió la correcta circulación del gas, causando la muerte de las dos personas. La luz regresó a las 05:00, y ellos tenían previsto seguir trabajando, de ahí la presencia del vehículo en el lugar”, detalló el oficial de la Policía. 

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