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Quito: así capturaron a los jóvenes que sembraban pánico en la Ferroviaria
Los sospechosos se dedicaban a robar a los pasajeros que viajaban en los buses que circulan por una tramo de la avenida Simón Bolívar.
Un señor, de 62 años, se acercó nervioso y desesperado a un policía que patrullaba en las calle Chicán, cerca de la avenida Simón Bolívar, a la altura del sector de La Ferroviaria, en el sur de la capital.
El ciudadano le pidió ayuda al gendarme y le contó que minutos antes había sido víctima de robo. Según el afectado unos jóvenes le arrebataron su celular y se habían escapado por unas gradas que conducen al barrio La Forestal.
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En ese momento, el uniformado realizó un operativo para ubicar a los responsables del delito y pidió a varias unidades que cierren el perímetro de algunas cuadras.
¿Cómo ocurrió el robo?
Uno de los gendarmes ubicó a dos sujetos cerca de unas gradas y los trasladó a la Unidad de Policía Comunitaria en donde estaba la víctima, quien reconoció a los detenidos y contó a los agentes lo que había sucedido.
El señor señaló que viajaba en un bus hacia el norte y estaba utilizando su celular. De pronto, un sujeto le arranchó e intentó huir, pero la víctima lo atrapó. Forcejaron por varios segundos y se acercaron dos jóvenes.
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El afectado creyó que le iban a ayudar a recuperar su teléfono, pero los desconocidos jalaron al delincuente para que escapara. Al ver que el señor no lo soltaba le dieron un golpe en el rostro y los tres se dieron a la fuga.
Mientras el afectado contaba los hechos, uno de los gendarmes recordó que horas antes una mujer también se había acercado al retén para denunciar que le robaron su cartera con 500 dólares en su interior y el celular.
¿Los detenidos tienen antecedentes penales?
Ella les dijo las características de cómo estaban vestidos los pillos y coincidían con los dos detenidos que atacaron al señor, de 62 años. La llamaron para que fuera a la Unidad de Policía Comunitaria para reconocerlos.
La afectada identificó a uno de ellos como el sujeto que le arrancho sus pertenencias. En ese momento, un hombre que prefirió no identificarse, pero dijo que era familiar de uno de los sospechosos, se acercó al retén y entregó un celular que, al parecer, era de una de las víctimas.
Los dos jóvenes fueron llevados a la Unidad de Flagrancia para iniciar el proceso judicial por el delito de robo. Uno de ellos registra antecedentes penales.
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