La última cabeza lanzada en un barrio de la ciudad de Machala, provincia de El Oro, fue la de Rubén Gustavo Mera Balladares, de 56 años. La dejaron el viernes 20 de septiembre de 2024, a 100 metros de su casa, en el sector Los Ceibos.

Según información policial, en la vivienda donde residía el decapitado, el 20 de julio pasado, fueron asesinados cuatro hombres durante un enfrentamiento, cuyas causas aún no han sido determinadas.

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Aquella vez, cuando la policía levantó los cuerpos, tres estaban en el patio y uno en una cama. Además, en el inmueble encontraron armas de fuego, tacos de dinamita y granadas. Dos personas fueron detenidas.

Ahora, los investigadores unen pistas entre esta masacre y la decapitación de Rubén Mera Balladares, quien fue detenido por tráfico de drogas en 2022. También buscan establecer si ese hecho estaría ligado con las otras tres cabezas abandonadas.

La policía guarda silencio, pero ha trascendido que las últimas cuatro cabezas halladas enfundadas tenían cortes precisos en el cuello, que habrían sido hechos con un cuchillo grande (matachancho).

Otro dato que analizan los investigadores es que las piezas humanas encontradas entre el domingo 15 y el viernes 20 de septiembre de 2024, tenían entre una y dos horas de haber sido cercenadas cuando las encontraron.

Con los cuatro últimos hechos, parece haber un tipo de patrón, porque luego de separar las partes humanas, las guardaron en fundas negras, colocaron en un cartón y las dejaron en sitios, al parecer, estratégicos, para que las vean. Además estudian el mensaje que dejaron junto a dos de los restos. Los cuerpos de ninguno de esos asesinados han sido localizados.

Las últimas cuatro cabezas fueron halladas en el barrio 12 de Noviembre, en una esquina de las calles Junín y Quinta Norte, y en Los Ceibos. Pero anteriormente, entre el 14 y 15 de agosto, se reportó el hallazgo de otras dos cabezas.

Una la encontraron en los exteriores de un colegio en el sector Machala Libre. Estaba envuelta en una funda plástica negra y contenía un panfleto. El otro hallazgo fue en el sector El Garrido, cantón El Guabo.

Todas estas cabezas podrían tener relación con la disputa entre dos células de la banda terrorista Los Lobos, que pelean por territorio, según datos policiales. (FC)

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