“Hijito, yo te dije que no salgas tan noche”. Ese era el lamento de la madre de Jorge Vera, mientras abrazaba a su vástago, que cayó asesinado en una de las esquinas de la cancha sintética del barrio Puerto Azul, de la parroquia Puerto Bolívar, provincia de El Oro.

El joven es una de las cuatro víctimas dejadas por unos sujetos que con fusiles y pistolas automáticas dispararon contra un grupo de chicos que se encontraba peloteando.

Juan Carlos Vasco, jefe de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) de El Oro, sostuvo que este tipo de asesinatos no es común por el sector, que los sujetos armados llegaron y dispararon contra quien se le cruzó en el camino.

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“Hay víctimas inocentes. No conocemos que sea dirigido para un objetivo específico... Cuando los victimarios huían, dispararon contra una persona que se encontraba afuera de su casa”, dijo el jefe policial, quien considera que la principal hipótesis del múltiple crimen sería por territorio para el posible tráfico de droga entre bandas que se disputan los barrios de Puerto Bolívar.

En el lugar de la tragedia quedaron los casquillos de pistola y fusil dispersos por la calzada. Personal de Criminalística acudió a fijar minuciosamente cada uno de los elementos balísticos y esclarecer este espeluznante crimen, cometido cerca de las 23:00 del miércoles 24 de mayo de 2023.

“No les dieron tiempo a nada, los sicarios dispararon a quien se movía, no tenían un objetivo, simplemente descargaron sus armas contra todos los chicos”, dijo un morador que habita frente a la cancha sintética, recientemente construida por el Municipio de Machala.

Fueron cuatro sujetos armados que llegaron a bordo de dos motocicletas y dispararon contra los muchachos, de entre 15 a 25 años, que jugaban su último partido antes de retirarse a sus respectivas casas.

Por salvar sus vidas, corrieron a una esquina de la cancha sin tener salida, porque el escenario deportivo estaba cercado con rejas.

Tras el reguero de sangre, quedó dolor y desesperación. En motos y carros particulares llevaron a los heridos hasta el hospital.

Los familiares de Jorge Vera no podían creer que su ser querido se encontraba muerto. Él cayó sin vida en el área donde se cobran los tiros de esquina. Su madre y hermanas abrazaron el cuerpo. “Hijito, yo te dije que no salgas a jugar tan tarde, mira lo que te hicieron”, repetía la señora entre sollozos, mientras que personal de Criminalística levantó las evidencias.

Las primeras víctimas fueron Jorge Felipe Vera Gracia, de 21 años; y Marvin C., de 16, cuyos cuerpos quedaron tendidos en la cancha.

Erick Rodolfo Quimí Calle, de 22 años, fue llevado de urgencia a una casa de salud, pero por las graves heridas, falleció. Él cursaba el segundo año de bachillerato y siempre practicaba deportes con sus amigos.

La otra víctima, Jorge Abraham Cun Alegría, de 23 años, murió a las 04:00 de este jueves 25 de mayo, en el hospital Teófilo Dávila.

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