umildad es el valor que tiene el ser humano para aceptar sus limitaciones y asumir que todos somos iguales, sin estar ni por encima ni por debajo de nadie, sino en las mismas condiciones y, por tanto, dispuestos a aprender de cualquier persona. Y Richard Carapaz no se cansa de recordarnos, en cada pedaleada, la dosis de reflexión diaria que nos hace falta para reconstruirnos y levantarnos ante cualquier adversidad.

Volver al podio del Giro de Italia no solo es motivo de orgullo, también es un poderoso mensaje de perseverancia, muy necesario para todos por el ambiente actual de Ecuador. El optimista siempre tiene un proyecto, el pesimista siempre una excusa. ¡Grande, Richie!

¿Qué enseñanza dejó Carapaz en este Giro?

“Carapaz nos enseñó que la disciplina y el trabajo duro son el camino correcto para alcanzar nuestros sueños, siempre hay que darlo todo en la pista”.

“Él es la relación directa del esfuerzo, dedicación y talento que lo mantiene en la élite, y eso se ve reflejado en sus éxitos. Con empeño se pueden lograr grandes cosas”.