Fue en septiembre de 2021 que un proyectil disparado por una pistola Baby Glock, que ahora está en manos de los investigadores, llegó a manos de peritos de Criminalística, en Guayaquil.

Ese fue el primero de 27 eventos violentos en los que dejó su huella hasta el momento de su incautación: el 17 de agosto de 2022, día en el que además fue detenido su presunto dueño: Darío Arturo Chancay San Lucas, de 34 años, apodado Morado.

El individuo fue aprehendido durante la investigación de un triple crimen ocurrido la noche del 15 de agosto en las calles 50 y Sedalana, del suburbio porteño. En el allanamiento a su inmueble, los agentes encontraron un teléfono con mensajes que supuestamente lo relacionan con diferentes atentados, entre esos el suscitado en la Calle 8 del barrio Cristo del Consuelo, en el sur porteño.

Incluso, luego de su detención, el ministro Carrillo informó públicamente que alias Morado había “confesado” el suceso. No obstante, no fue procesado por asesinato ni por actos de terrorismo, sino por el delito que la Fiscalía (con base en las evidencias) podría demostrar: tráfico de armas, armas químicas, nucleares y biológicas.

Los casos

El coronel Carlos Perugachi, jefe zonal de Criminalística, detalló que tras un análisis a la Baby Glock incautada se corroboró que fue utilizada en 27 hechos criminales, que dejaron un saldo de 23 personas fallecidas y 13 heridas. También explicó que en 2021 dejó rastros en siete casos, mientras que este año fue detonada en 20 atentados.

El jefe policial mencionó que el arma es de un calibre conocido como .45 (de menor fuerza que el de 9 milímetros), pero aclaró que se trata de una pistola “bastante efectiva”.