Desde hace dos años y medio, la cantante rumana Oana Chelaru no pisaba Ecuador. Se alejó del país por proyectos laborales y, en el camino, conoció al peleador de la UFC mexicano Yair ‘La Pantera’ Rodríguez, con quien mantuvo una relación sentimental de un año. Este capítulo llegó a su fin en enero de 2024.

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La joven, recordada en Ecuador por su participación en el reality Combate, asegura que ya superó esa ruptura sentimental, aunque prefiere no hablar mucho del tema. Solo le desea lo mejor a su ex, quien además es conocido de José Luis Verdugo, ex de la deportista ecuatoriana China Muñoz. Oana y Verdugo ganaron el reality Por amor o por dinero de Telemundo en 2022, llevándose un premio de 200,000 dólares.

“Ahora vengo por un proyecto de una marca de maquillaje. Obviamente tenía ganas de ver a la gente. Tengo entrevistas y me da nostalgia recordar esos momentos, porque aquí los medios de comunicación me abrieron las puertas para ser quien soy. Cada vez que vengo a Ecuador, mi corazón se siente en casa; me siento en paz y feliz, y mi aura cambia. No sé por qué, pero brillo aquí”, expresó Chelaru.

¿Por qué se alejó?

El amor, el amor... Me llevó por otros rumbos. Me desvié un poquito, pero ya estoy de regreso. Hace mucho que tenía que venir, pero estuve en otros proyectos fuera de aquí. La vida me llevó por otros países, pero desde enero estoy soltera.

Sobre su ruptura sentimental

¿Terminaron en buenos términos? ¿Qué pasó?

No me gusta hablar de mis cosas privadas. Considero que fue una etapa maravillosa de mi vida, en la que tuve que aprender una gran lección. Me quedo con lo positivo. Ahora estoy en una etapa maravillosa, estoy sanada, estoy bien y no tengo nada malo que decir. Soy un amor y quiero transmitir amor. Si me pongo a hablar, mejor dejémoslo así, porque es más bonito dar amor

Vimos que te tomaste tu tiempo para sanar, hacías meditación y todo eso, ¿cómo fue esa etapa?

Fue la etapa más dura de mi vida. Nunca había tenido un sentimiento de tanto dolor, como si algo de mi vida no estuviera, no existiera. Fue un proceso muy fuerte, pero también muy bonito. Ahora que lo he sanado y miro hacia atrás, ¡guau!, en qué me he convertido. Soy más fuerte, me valoro más. He puesto mi amor a prueba, para ver hasta dónde soy capaz de dar. Ahora sé lo que valgo y lo que puedo dar. Estoy más enfocada en mis proyectos y he dejado de lado ese tema del amor.

Su lado artístico y su amor por la música

¿Regresarás a la música?

Este año fue de limpieza. Se fueron los amigos que tenían que irse. Fue un purgatorio, se limpió energía y me encontré a mí misma. Este año fue de pureza y renovación para mí. La música me decepcionó bastante. El mundo detrás de la música no es tan bonito como se ve por fuera; hay muchos sacrificios. Cuando alguien invierte en ti, el 80 % de las decisiones no son tuyas. Me cansé un poco de eso. Entonces, decidí hacer un proyecto que me dé sustento para invertir en la música y hacerlo como yo quiero, transmitir lo que deseo sin que una disquera me diga cómo, cuándo o dónde ir.

Buscarás autofinanciarte...

Sí, aunque sea más lento, quiero que sea a mi gusto, a mi manera y con mi dinero. Le doy gracias a Dios que esto pasó en un momento correcto. Ahora sé lo que quiero y puedo tomar mis propias decisiones. 

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