La gaviota de plata que trajeron las Damas de Oro, tras su triunfo en el festival chileno de Viña del Mar, hará un recorrido por los diversos medios de comunicación como muestra del apoyo recibido y para que todos puedan disfrutarla.

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El trofeo obtenido por la interpretación de Canto de mi tierra ocupará un puesto especial en la productora, junto a otros reconocimientos recibidos por el trío ecuatoriano conformado por Lila Flores, Katty Elisa y Mayensi Rivera.

Las cantantes le comentaron a EXTRA que estaban ansiosas, cansadas, pero felices. Lo primero que hicieron al pisar Guayaquil, después de más de 15 días fuera del país, fue entregarse al cariño de sus familias y de sus mascotas.

Katty Elisa extrañaba su cuarto, cama y cobija, además de sus ocho mascotas, entre chihuahuas, shih-tzu y una gata, a las que les tiene ‘un parque de diversiones’ en el patio.

“Ver a mis mascotas, que las extrañaba tanto, subirlas a la cama y disfrutar de mi colcha. Todos dormimos ese día juntos”, aseguró.

Lo que más le afectó fue el cambio de horario, ya que tenían que levantarse a las 7 de la mañana cuando en Ecuador eran las 5, lo que, por su condición médica, tras haber sufrido aneurismas, le pudo traer complicaciones.

A Mayensi, haber traído el premio no le ha quitado la humildad. “Seré la misma de siempre. Hay que estar bien aterrizados en estos tiempos, porque el que cree que está subido en la nube de Gokú, va a terminar mal, y de lo que menos tengo ganas es de eso”, enfatizó.

¡Regresó a comer!

Luego de estar con su familia, corrió a abrazar al personal de su restaurante y a comer moro con costilla, uno de los platos del menú que tanto extrañaba.

“Llegué con las piernas hinchadas, pero más pudo el gusto de que Ecuador sienta la esperanza de algo nuevo, por lo menos en la música, por todo lo negativo que se vive a diario, y haber explotado las redes con buenas noticias para nosotras fue gratificante”, comentó Rivera.

Lila Flores dice que, apenas llegó a Guayaquil, sintió el agotamiento por el trajín y está tratando de adaptarse al horario ecuatoriana.

“Obviamente, corrí a ver a mi familia, fui feliz de abrazar a mi hija. Ella me fue a recibir y la tuve abrazada todo el camino. Llegué a abrazar a mis padres, que me estaban esperando”, explicó la pelinegra.

El grupo de apoyo fue netamente familiar, compuesto por personas de su confianza. Entre ellas estaba Danyela, hermana de Lila, a quien le debe parte del éxito obtenido.

“Ella estuvo conmigo en Viña, se quedó 10 días, y en este Carnaval está cumpliendo los compromisos musicales con Las Chicas Dulces. Estoy disfrutando con mi familia”, recalcó Flores.

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