Hace diez días, el pasado 19 de abril, se paralizó el torneo nacional por el toque de queda de los fines de semana en Ecuador (dura hasta el 20 de mayo) y aún no hay fecha definida para que la pelota vuelva a rodar, según Miguel Ángel Loor, presidente de la LigaPro.

La tarde y noche del martes pasado, las autoridades del Comité de Operaciones de Emergencia Nacional (COE) y del ente regidor del fútbol local se reunieron para negociar la reactivación del campeonato, pero no llegaron a ningún acuerdo.

“Hasta el momento no se ha aprobado nada para el reinicio del fútbol. Somos respetuosos de las disposiciones de nuestras autoridades. Seguiremos argumentando que se analice nuestra industria y podamos darle esa alegría a la gente. Pero repito: ni el COE ni nadie ha autorizado nada”, difundió Loor en su cuenta oficial de Twitter tras la junta.

En este panorama, el preparador físico César Benalcázar, el exdirigente deportivo Álex de la Torre y el técnico Carlos Torres Garcés coinciden en que se debe buscar una solución rápida, porque los perjudicados son los jugadores y los clubes. Obviamente, ellos recalcan que debe ser respetando todas las medidas de seguridad.

Álex de la Torre, dirigente deportivo

Con la paralización del torneo, dice, los clubes corren el riesgo de perder los ingresos por publicidad. “Los que no tienen un respaldo económico se verán en la obligación de cerrar sus puertas porque no van a tener para pagar a sus jugadores. Al final del año pueden perder hasta la categoría”.

César Benalcázar, preparador físico

Destaca que los futbolistas al no tener partidos oficiales van a ir perdiendo su condición física. “En la primera semana el deportista pierde el 10 % de su físico. En la segunda semana ya no será 20, sino 30 por ciento. Por más entrenamiento que hagan no se asemeja en lo absoluto al ritmo de los partidos oficiales”.

Carlos Torres Garcés, director técnico

Recalca que los partidos son importantes para ir practicando la táctica, porque en el entrenamiento solo se trata la parte teórica. “Lo que permite a los jugadores y entrenadores entender el sistema táctico y ver si funciona en el equipo son los partidos. Con la paralización vuelven a cero”.