Cuando Darwin Castro tenía 16 años y perdió totalmente su visión, tras padecer queratocono (enfermedad degenerativa de la córnea) y glaucoma, al principio pensó que no podía hacer nada, y que su condición era "una limitante, un estorbo para la vida". Tres años después, en 2013, empezó a buscar varias alternativas como terapia de rehabilitación.

Tras probar suerte en el fútbol, natación, y vóley para personas no videntes, se decantó por el atletismo. En el 2014 conoció a Sebastián Rosero, su guía, y empezó así su carrera deportiva. “Cuando conocí el mundo del deporte sentí que podía transmitir mi experiencia de vida y sobretodo hacer muchas cosas más”, dijo a EXTRA el cuencano, de 27 años.

Hasta ahora, Darwin ha participado en los Juegos Parapanamericanos 2015, el Mundial de Paratletismo en Londres 2017, donde terminó en cuarto lugar en la prueba de 5.000 metros planos. “Uno de mis grandes logros es clasificar y participar en los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro 2016 y convertirme en el primer atleta ciego ecuatoriano en participar y ganar el primer diploma para el país”, contó. Además, obtuvo una medalla de oro en los Parapanamericanos de Lima 2019 y ese mismo año obtuvo un quinto lugar en el Campeonato de Paratletismo en Dubái.

El velocista reveló que antes de iniciarse como atleta realizó el trámite para obtener el carné del Consejo de Igualdad para la Igualdad de Discapacidades (CONADIS), que duró cuatro meses: “Me hicieron exámenes, me pidieron certificados oftalmológicos que certifiquen mi discapacidad y fue un proceso bastante largo hasta que me den el carné”.

Darwin dice que su visión es totalmente nula, no ve nada, pero según su documento, su discapacidad visual es del 73 %, debido a que la evaluación del CONADIS incluye también un análisis socioeconómico. “Eso hace que tenga más-menos discapacidad”, explicó Rosero.

Darwin lamentó que personas obtengan el carné de discapacidad de forma fraudulenta para beneficiarse de este documento. “Nos pusieron bastantes condiciones (…). Es lamentable que se tomen el nombre de las personas con discapacidad, de quienes verdaderamente tenemos problemas para desenvolvernos en el entorno y en el mundo. Necesitamos de esos derechos y beneficios que la Ley Orgánica de Discapacidades nos ha dado”, dijo el deportista, quien espera que los culpables de estos delitos sean sancionados.

Según Santiago Chango, director técnico metodológico del Comité Paralímpico Ecuatoriano, de los 450 y 500 deportistas discapacitados registrados, un 90 % cuenta con el carné. En esa cifra se encuentra la también atleta paralímpica Kiara Rodríguez.

La joven de 17 años es especialista en salto largo y ha competido en importantes eventos internacionales, como el Mundial Junior de Paratletismo 2019 en Nottwil, Suiza, donde obtuvo tres medallas doradas. Asimismo, ganó la medalla de oro en el Mundial de Paratletismo de Dubái de aquel año. Ella contó a EXTRA que, desde su nacimiento, padece una parálisis braquial, una lesión en los nervios periféricos del plexo braquial. Por esta razón, su brazo izquierdo permanece inmóvil.

Sin embargo, a pesar de que siempre supo que tenía un problema en el brazo, no fue sino hasta los 12 años cuando se enteró de su condición: “Yo no sabía que tenía discapacidad. Cuando ingresé a entrenar, mi entrenador habló con mi mamá y dijo que yo tenía una discapacidad. Decidimos acudir a un centro de salud pública donde yo realizaba las terapias del brazo. Ahí me dieron una hoja, me evaluaron y me dieron el porcentaje, luego me dieron el carné”, relató la guayaquileña.

Según su carné del Ministerio de Salud, Kiara cuenta con una discapacidad del 35 %. A pesar de que no quiso pronunciarse sobre los recientes escándalos de corrupción, sí dijo que “fue un poco complicado” realizar el trámite para retirar la credencial: “tardó un mes porque mi mamá trabajaba y no tenía tiempo para salir de aquí para allá conmigo por el trabajo”.

Santiago Chango, por su parte, sí mostró su inconformidad con estos casos porque existen deportistas que pasan peripecias para poder acceder a este documento: “El mismo hecho de que le den una cita médica para la evaluación es una demora por la forma en que se generan las políticas de salud en nuestro país. Además de eso, muchas veces les dan una valoración muy baja. Ahora vemos personajes públicos que tienen discapacidades elevadas, del 50 %, cuando no tienen. Nosotros tenemos personajes con discapacidad auditiva y para darles el carné les mandan a hacer una serie de exámenes médicos. Hay deportistas sordos y no les dan el 100 % como sordos, es algo lamentable y da vergüenza”, subrayó.

Como ejemplo, Chango recordó que una deportista con enanismo y rasgos de discapacidad intelectual no se le dio el carné, debido a que a las personas con estatura baja no se las considera discapacitadas, pero a nivel internacional sí son elegibles para ser deportistas paralímpicos. “Nosotros tuvimos que pagar el 100 % del pasaje para el evento al que asistía, como una persona regular”, afirmó.