La decisión de mandar a Robert Burbano a entrenar a las formativas de Emelec fue ‘la gota que derramó el vaso’ en el equipo eléctrico, puesto que “demostró que el camerino está dividido”, según los exfutbolistas azules, Silvano Estacio y Víctor Montoya.

Ante esta situación que viven los emelecistas actualmente, Estacio considera que a la plantilla del 'Foco' le hace falta un “jugador con carácter fuerte”, que ponga ‘rectitos’ a los que “no están comprometidos” y causan malestar a la interna del equipo dirigido por Ismael Rescalvo.

“El grupo no está unido. Antes estos problemas no llegaban ni a la directiva. Al que no estaba metido lo cogíamos, primero le hablábamos y si no entendía, hasta puñetes le dábamos para que reaccione y el día lunes entrenábamos como buenos hermanos. Esto es sin resentimiento y con compromiso”, recordó exjugador polivalente.

"Juegan sin ganas"

Una de esas muestras se evidencia en el campo de juego, donde los futbolistas entran “sin ganas y sin actitud”, cuando es en esos momentos que más se las requiere; y al dejar que a un “familiar” lo separen del grupo, como pasó con Burbano.

“Cuando un grupo está fuerte se considera una familia. En este caso no sé cómo se estarán manejando las cosas a la interna, pero en nuestros tiempos hubiéramos hablado con los dirigentes y los entrenadores para resolver esto entre nosotros (jugadores). Burbano es bueno, quiero creer que él lo hizo sin ofender al club”, destacó Estacio.

La división hace daño

Por su parte, Montoya manifestó que con la división del camerino no van a lograr salir del hueco en esta segunda fase del campeonato ecuatoriano. “Los únicos que pueden sacar del mal momento al equipo son los jugadores”.

Además, el exdefensa dijo que el grupo tiene que buscar la solución para fortalecerse en lo futbolístico.

“Ellos tienen que ponerse fuertes en este momento para salir de la mala situación. Aún quedan varios partidos para que el equipo se recupere”, finalizó.