Cinco pasos le faltan a Aucas para conseguir algo histórico: disputar la final de la LigaPro y sellar su boleto a la Copa Libertadores. En la interna del Papá toman con tranquilidad el estar tan cerca de ganar la segunda etapa y prefieren ir con calma.

El empate en casa ante Emelec les permitió ampliar a 15 sus partidos como invictos en el torneo, además de mantener una buena distancia con sus perseguidores.

“El resultado nos permite continuar en una posición favorable. El equipo dio muestras de carácter ante un rival que vino a hacer un buen partido”, señaló Pedro de Pablos, asistente técnico de Aucas.

También se refirió a una acción que los jugadores orientales reclamaron como penal, aunque el árbitro Luis Quiroz consideró que el balón golpeó de forma accidental en el codo de Marlon Mejía. “No nos sentimos perjudicados por el arbitraje, solo nos extrañó que no haya existido revisión del VAR”, manifestó De Pablos.

UNA SOLA SALIDA

Una de las ventajas que tiene el Papá, además del sólido juego que ha presentando en la etapa, es que cuatro de los cinco partidos que le restan serán en Quito. Y de ellos, tres son como local. 

El estadio Gonzalo Pozo se ha convertido en un fortín para los orientales, que no han caído en casa en lo que va de la LigaPro. Registran ocho victorias y cuatro empates. Un motivo más para el membrete de favorito del Papá. 

El entrenador César Farías reconoció que son los más opcionados para ser rivales de Barcelona en la final. Dejó claro que “somos favoritos, pero eso no nos asegura ganar partidos ni la etapa. Debemos seguir siendo protagonistas”.

El siguiente reto de los oro y grana será el domingo 18 de septiembre, cuando reciban a Técnico Universitario de Ambato. Para este juego el técnico Farías volverá al banquillo y el volante Sergio López ya podrá ser considerado.

Quienes seguirán siendo bajas son los zagueros Luis Romero y Ricardo Adé, que estarían recuperados para la disputa del título.