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Buena Vida
Ser mamá soltera también tiene su lado bueno
Las familias monoparentales cada vez son más comunes, sin embargo, criar un hijo sola puede ser estresante.
Ser madre soltera también tiene un lado bueno: puedes elegir qué valores puedes fomentarles a tus hijos sin tener que discutir con nadie, porque dentro de una familia, con papá y mamá, la responsabilidad de la educación es de los dos.
La psicóloga Jennifer Carranza, especialista en educación infantil, asegura que por el simple hecho de ser dos personas se piensa diferente y ambos entran en un debate de orientación.
La tarea de criar a un hijo sin la figura paterna no es fácil, pero también sería injusto no reconocer que trae consigo muchas ventajas, así lo afirma la profesional. La más importante son los lazos afectivos. “El cariño y el amor que se crea entre esa mamá y su hijo es mucho más fuerte. El hecho de que ambos formen la familia, de que pasen el día juntos, de que compartan todo y de que no haya otra persona más, hace que los lazos afectivos entre los dos se fortalezcan”, señala Carranza.
- LAS CLAVES
2 Demuestra siempre una actitud positiva. Si tienes días complicados puedes sincerarte con tu hijo, pero recuérdale que las cosas mejorarán. No pierdas el sentido del humor al afrontar los desafíos que se te presenten.
Tips para disfrutar de tu maternidad
- Viaja donde quieras. Comparte con tu hijo. Dale tiempo de calidad; ellos crecen pero siempre tendrán presente el amor que les has dado. Así que llévalos contigo cuando puedas.
- No te desquites con el niño. Ser madre soltera no es fácil, y el niño suele ser la víctima de tu enojo. No dejes que esto te controle, puede ser muy contraproducente.
- No te expreses mal de su padre. Si tu hijo es pequeño no entenderá muchas cosas, no debes crear una mala energía entre ellos.
- Pide ayuda. Si sientes que no puedes controlar tus emociones pide ayuda. Este proceso es normal, sin embargo, no debes dejarte llevar por los sentimientos negativos.
Para saber
Los niños provenientes de hogares monoparentales podrían padecer depresión y baja autoestima. Los signos son: aislamiento social, sensación de tristeza, soledad o falta de afecto, irritabilidad y desesperanza.