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¡Resurge el “paraíso”!
Los que se quedaron en el popular balneario de Montañita, comían una vez al día por contribuciones de amigos y comuneros. Ahora han vuelto a surfear
Sergio Bustos es un bartender nativo de Buenos Aires (Argentina) que lleva un año y medio viviendo en Montañita. Él es uno de los aproximadamente 250 extranjeros que se resistieron a abandonar la Península cuando empezó la emergencia sanitaria por el coronavirus.
Recuerda con nostalgia a varios de sus compatriotas de Mendoza y Rosario que llegaron junto con él al famoso balneario en busca de trabajo, pero ante el temor de enfermar y morir por la pandemia, decidieron regresarse a su país en vuelos humanitarios.
Los extranjeros se alarmaron y muchos entraron en pánico a principios de abril con el fallecimiento de Silvino Borbor, cariñosamente conocido como Chivo, quien era vicepresidente de la comuna. “Que se muera una autoridad local es muy grave, en verdad que se sintió miedo, la enfermedad ya estaba entre nosotros y en cualquier momento nos podía atrapar”, comentó Bustos.
Esto aceleró los trámites en el consulado argentino. En total fueron seis vuelos humanitarios. Gran parte de los viajeros salieron de Montañita, Olón y Salinas.
La mayoría de los que partieron fueron aquellos que estaban de paso y los que recién habían llegado; mientras que los propietarios de negocios, por no perder sus inversiones, decidieron arriesgarse y se quedaron.
Bustos intentó volver a Argentina, pero no tuvo suerte porque cuando estaba listo para el retorno, los contagios se dispararon y no hubo más vuelos. Él, al igual que otros compatriotas, se quedó sin ahorros y solo se alimentaba una vez al día, encerrado en un sitio de hospedaje.
“Recibimos una contribución del Gobierno argentino, pero eso no alcanzó. Hemos podido sobrevivir gracias a las contribuciones de amigos y de los comuneros de Montañita que nos han regalado comida. Además, por estos meses no estamos pagando alojamiento. Han sido momentos muy duros; acá la gente es muy bondadosa”, reconoció Bustos.
Vuelve la vida a la playa
Con la reciente aprobación del Comité de Operaciones Emergentes Nacional (COE), en el que se establece la autorización para que las personas puedan ejercitarse al aire libre de manera individual, los surfistas han vuelto a domar las olas de Montañita y Olón. “Salimos un momento a disfrutar de este encanto natural. Han sido tantos días de encierro, por lo menos ya se puede correr en la arena”, comentó Zaira Fernández, otra argentina.
Bustos y Fernández coinciden en que la mayoría de los foráneos que se han quedado por amor al balneario. Para ellos es muy doloroso irse. “Esto es un paraíso, algo lindo. Cuando me comunico con mis familiares en Córdova me dicen que ya está pasando lo más grave, igual como sucede en Ecuador, entonces seguiré aquí”, enfatizó Fernández.
Regresaron unas 400 personas
El ecuatoriano Lister Aguilera es un empresario turístico, quien durante la pandemia se ha mantenido cerca de los extranjeros. Él gestionó con los consulados y cancillerías los vuelos humanitarios.
“La colonia argentina era la más numerosa y felizmente el Gobierno de ese país acogió el pedido y se pudo trasladar unas 400 personas que retornaron a su patria”, comentó.
Calcula que el 70 por ciento de extranjeros que estaban en Montañita volvió a sus naciones por temor a contagiarse.
Aunque los contagios han disminuido en Santa Elena, a Aguilera le preocupa la situación de colombianos y venezolanos que viven en esta provincia, quienes no han podido regresar a sus países.