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Los cuatro detenidos están con prisión preventiva por el delito de robo.Cortesía

En Quito mujer 'voló' del susto

Adulta mayor fue asaltada y secuestrada. Para huir de los pillos, saltó del auto en donde la retuvieron.

A Lucía le da miedo estar sola en su casa luego de que cuatro sujetos la asaltaron y secuestraron en un auto, en el norte de Quito. Para salvarse, la mujer de la tercera edad se lanzó del vehículo en el que estaba retenida cuando los tipos pretendían ir a un lugar desolado para abandonarla.

Luego de escapar, Lucía y su familia denunciaron el hecho que quedó grabado en cámaras de seguridad del conjunto residencial donde ocurrió todo. Con esas pruebas, tres hombres y una mujer fueron detenidos por miembros de la Policía Judicial (PJ).

Según la entidad, los robos a personas, de autos y a domicilios son los más recurrentes en la capital. Pablo Hadathy, jefe de la PJ de Quito, dijo que las cifras de este año son más bajas al anterior (ver infografía). Aunque la percepción de la gente sea contraria.

Para despistar a las autoridades, los tipos alteraban el número de placa del taxi con cinta adhesiva.

El oficial explicó que esta banda desarticulada el fin de semana se dedicaba al secuestro extorsivo, utilizando como fachada un taxi amarillo.

Además, forzaban a las víctimas a conducirlos a sus domicilios donde ‘saqueaban’ lo que más podían. Eso le pasó a Lucía, quien luego de subir al taxi en El Inca, norte de Quito, fue llevada bajo amenazas hacia su vivienda.

El taxi llegó al conjunto residencial de la víctima y lo dejaron pasar.Captura de video

En el vehículo no solo estaba el chofer, sino también una mujer escondida en el asiento del copiloto que le dio un vaso con agua y le exigió que lo tomara. “Lo que hizo mi mamá fue botar el líquido sin que ellos se dieran cuenta”, contó a EXTRA la hija de Lucía.

“Los sujetos obligaban a sus víctimas a ir a sus domicilios para llevarse sus pertenencias”.Pablo Hadathy, jefe de la PJ de Quito

La inseguridad

Ya en su casa, la mujer no tuvo más opción que dejar que los tipos se llevaran sus joyas, dinero y el auto de su hija, en el que la embarcaron. “Mi mamá tenía tanto miedo de que la mataran que no le importó arrojarse del auto en movimiento”, refirió la pariente.

. Dos de los tipos se habían escondido en la cajuela y se bajaron para ir a robar.Captura de video

Mario Pazmiño, especialista en seguridad, dijo que la reacción de la víctima fue comprensible. Esto porque el temor a morir es muy grande, ya que los niveles de violencia en los asaltos han crecido desmesuradamente en Quito, así como en otras ciudades.

“Quienes están detrás del cometimiento de estos delitos son estructuras del crimen organizado. Y entre más temor infundan, más fácil será cometer las fechorías”, precisó.

“Creo que la delincuencia se ha incrementado por todo lo que se ha escuchado últimamente”.Patricio Jaramillo, ciudadano

A su criterio, si las cifras de estos casos disminuyeron no significa que haya una mejor percepción de seguridad. Lo que ocurre es que hay querellas que no se hacen justamente ante el pánico de la gente por posibles represalias.

Este criterio lo comparten ciudadanos como Patricio Jaramillo, guardia de seguridad y activista de este gremio, quien precisó que ahora a los ladrones no les importa nada.

“No creo que la delincuencia ha disminuido. Más bien ha aumentado por todas las cosas que se han escuchado últimamente”, aseveró Jaramillo.

A ‘cana’

En este auto rojo iba la mujer y cuando estuvo a punto de salir, ella se lanzó.Captura de video

Hadathy indicó que la banda de asaltantes desarticulada tiene, al menos, otras cuatro denuncias por el mismo delito. De los cuatro, los tres hombres tienen antecedentes penales por robo. “La mujer implicada era guardia de seguridad y fue detenida en su lugar de trabajo”, comentó el oficial.

El domingo pasado se realizó la audiencia de flagrancia por el delito de robo y se dispuso la prisión preventiva de Manuel Guanoquiza, Patricio Villamarín, Rolando Quishpe y Micaela Pillo.

Entretanto, la familia de Lucía deberá esperar cerca de dos semanas para recuperar el carro que está en los patios de la PJ. La víctima ahora se irá a la casa de uno de sus dos hijos porque el miedo que experimentó no la deja vivir en paz.