El teniente coronel Roberto Santamaría, quien hasta el 8 de octubre ocupaba el cargo de jefe del distrito Nueva Prosperina, una de las jurisdicciones con el mayor número de asesinatos en Ecuador durante 2023, asumió desde ayer el mando del distrito Durán. EXTRA entrevistó al oficial de la Policía para conocer las acciones que tomará para combatir la delincuencia en este cantón, uno de los más violentos del país después de Guayaquil. Durán registra 388 asesinatos en lo que va del año, 140 más en comparación al 2023 en el mismo lapso.

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¿Qué estrategias implementará para combatir la violencia en Durán?

Se implementará un cambio en el modelo de gestión operativa. La estrategia pasará de contar con una policía enfocada en la prevención a una fuerza policial más combativa y reactiva. Se buscará enfrentar directamente a las organizaciones delictivas, tal como se ha hecho en Nueva Prosperina.

¿Cree que el modelo de gestión implementado en Nueva Prosperina sería efectivo en Durán?

Estamos trabajando sobre las lecciones aprendidas, y el mismo modelo de gestión operativa que aplicamos en otras zonas será implementado en Durán. Sin embargo, es crucial contar con el apoyo de todas las autoridades. Para desmantelar las economías ilegales, la Fiscalía y la UAFE (Unidad de Análisis Financiero y Económico) juegan un rol fundamental, ya que su intervención es clave para combatir las estructuras delictivas que sustentan la violencia.

¿Cuáles fueron las fallas o las acciones que no se ejecutaron antes de su llegada para combatir la violencia y el crimen?

No puedo afirmar que hubo errores, ya que cada uno de los comandantes asignados define su accionar con base en la experiencia adquirida en el territorio. Los modelos de intervención son dinámicos y deben adaptarse a las particularidades de cada zona. Para Durán, hay tres factores claves. Primero, la comunidad, donde es vital recuperar la confianza ciudadana. Segundo, las autoridades, especialmente el Municipio, que actualmente está totalmente desarticulado en cuanto a seguridad territorial. Y tercero, la necesidad de implementar políticas públicas efectivas, coordinadas tanto a nivel estatal como local.

¿Qué significa para usted asumir el mando en un cantón gravemente afectado por la violencia?

En Durán se asesina a más de una persona por día. La experiencia en Nueva Prosperina, que el año pasado fue el lugar más violento de Ecuador, ha sido clave para entender el desafío que enfrentamos. La confianza del mando institucional, al ver los cambios logrados en esa zona, representa un nuevo reto en mi carrera profesional. Creo que los resultados obtenidos en Nueva Prosperina han sido considerados de manera positiva, y acepto este desafío con una actitud proactiva. (AEB)

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