El hombre que hace seis años le tendió la mano y lo ayudó a reconstruir su hogar, ahora sería el ‘monstruo’ que destruyó la inocencia de sus dos hijas, quienes sufren de discapacidad intelectual.

Darío, de 71 años, el padre de las víctimas enviudó hace 20 años y quedó a cargo de sus seis vástagos. Los cuatro mayores se casaron, y las dos menores siguen bajo sus cuidados, debido a sus condiciones.

Una década después una nueva tragedia volvió a golpear su hogar. Darío perdió su casa, debido a que María, la quinta de sus hijos y quien sufre el 60 por ciento de limitación intelectual, provocó un incendio que destruyó la vivienda que alquilaban, en el suburbio de Guayaquil.

Con la ayuda de sus vecinos, el padre limpió el solar y continuó habitando en el lugar por dos años más. Sin embargo, en su desesperación por buscar mejores condiciones de vida para sus hijas pidió ayuda a José Romero, un amigo del templo evangélico donde la familia asistía.

“Este señor me ofreció un espacio en la parte posterior de su casa (en el sur porteño ) -recuerda Darío-. Los primeros cinco años todo transcurrió con normalidad. Pero hace varios meses noté que algo raro pasaba. José ya no iba al templo y siempre que lo invitaba me contestaba que estaba cansado. Él fue un lobo vestido de oveja”, añadió.

Lo pescó en pleno abuso

El adulto mayor cuenta que tuvo una corazonada, sentía que su amigo estaba traicionando su confianza. “El pasado 8 octubre (de 2020)  salí a comprar pan. Al regresar encontré a José tocando las partes íntimas de mi hija menor”, confesó entre lágrimas el septuagenario.

Sorprendido por lo que vio, le reclamó pero el supuesto abusador le contestó que no pasaba nada, que solo le tocaba la barriga. Luego de eso se retiró.

Las explicaciones no convencieron a Darío, pues estaba seguro de lo que había visto. Esa misma noche tomó a sus hijas del brazo y las llevó hasta la Fiscalía para denunciar a su casero y ‘amigo’.

Extraño bulto

Darío contó a las autoridades que hace unos meses notó que el vientre de Victoria, quien tiene el 80 % de discapacidad intelectual, estaba abultado, pero pensó que era producto de una operación en el colon a la que fue sometida hace 10 años.

“Antes de llevarla a la Fiscalía le hice unos exámenes a mi hija y comprobé que estaba embarazada. El mundo se me vino abajo, nunca pensé que el hombre que me dio la mano le iba a desgraciar la vida a mis dos hijas”, manifestó Darío.

El denunciante aseguró que su otra hija también habría sido víctima de violación por parte del mismo individuo y que el ultraje sexual habría ocurrido en reiteradas ocasiones.

Los nombres de las víctimas fueron cambiados para proteger sus identidades.

Procesado por el delito de abuso sexual

El fiscal Wilson Álvarez indicó que el sospechoso de violar a las dos mujeres discapacitadas fue detenido a las 16:00 del pasado 8 de octubre cuando fue presentada la denuncia.

“Con estos antecedentes y al existir los suficientes elementos de convicción de un delito flagrante, la policía realizó la aprehensión y traslado del detenido, de 59 años, hasta la Fiscalía”, explicó el funcionario judicial.

Álvarez señaló que tras la audiencia de formulación de cargos al hombre se le dictó prisión preventiva por el delito de abuso sexual, por tratarse de un delito flagrante. La instrucción fiscal en su contra, la cual durará 30 días.

Al sospechoso tambien se le inició dos investigaciones previa por las presuntas violaciones a las dos hermanas.