Exclusivo
Actualidad

Jorge quedó encantado con el evento que realizaron por el feriado de carnaval.alex lima

En Guayaquil se vivió el carnaval chonguero

Jorge aprovechó que su familia lo dejó solito en su casa y fue a conocer un night club, donde jugó con las ‘peladas’

Por la inseguridad que se vive en Guayaquil, sus padres lo dejaron cuidando la casa en este feriado (desde el sábado 26 de febrero hasta el martes 1 de marzo). Jorge (nombre protegido) pensó que pasaría aburrido, pero terminó jugando carnaval con las ‘peladas’ de un night club ubicado en el kilómetro 7,5 de la vía a Daule, al norte porteño.

Sábado. 23:00. El guayaquileño, de 27 años, llegó solo al chongo, ya que quería ‘matar el aburrimiento’. Sus ‘panas’ de vacilada tampoco estaban en la ciudad. Llanero solitario.

Víctima de los nervios, Jorge se quedó parado por un momento cerca de la puerta de entrada y empezó a mirar el movimiento sensual de las chicas. Tanto era su inquietud, que tenía que sostener con sus dos manos la única bebida energética que se tomó a lo largo de dos horas.

Tras dar un vistazo, caminó a paso lento y se ubicó en una esquina del establecimiento, como si se escondiera de alguien. Y no era para menos, ‘debutaba’ como cliente en un night club, pero estaba decidido a ‘romper el coco’.

“Mi familia se fue a la playa y me dejaron solito en la casa. Desde el viernes estoy solo y ya estaba aburrido, por eso que me vine a El Gato. Me vine solo porque no tenía quién venga conmigo. Es mi primera vez en un chongo, por eso que me demoré hasta para entrar, en el carro me quedé como 20 minutos pensando si entraba o no”, contó entre risas.

Así fue la noche de espuma carnavalera en guayaquilAlex Lima

Luego de ver un baile erótico su estado de ánimo cambió. Dejó a un lado la botella de energizante y se pidió su primera ‘biela’, la cual no se tomó porque terminó mojando a las chicas cuando le empezaron a lanzar espuma carnavalera. No se molestó, por lo contrario, empezó a disfrutar su noche. “No me moje, no me moje, no moje”, gritó mientras se trataba de cubrir.

“No pensé que mi primera vez en un chongo sería tan divertido. Antes no había venido porque no me llamaba la atención, pero ya me doy cuenta de que las ‘jodas’ son buenas. Ojalá que la espuma no manche la ropa, porque si no mi mamá se puede dar cuenta que salí a jugar carnaval”, manifestó Jorge, quien se retiró cuando el local cerró, a las 02:00.

Así como él, otros clientes, con cerveza en mano, gozaron con el show húmedo. Tampoco les molestó ser chisgueteados por las chicas. A diferencia de la salvajada carnavelera en las calles, aquí todo ‘cariñito’ era permitido...

No esperaban tanta gente

Enrique Vásconez, administrador del night club, aseguró que por el feriado de carnaval no esperaban tanta afluencia de personas.

“Este evento siempre lo hacemos, pero no pensamos que un sábado por la noche de feriado se llenara el local. La temática terminó divirtiendo a muchos clientes, porque hasta jugaron con las chicas”, dijo.