La noche del viernes 15 de enero la Fiscalía General del Ecuador publicó en su cuenta de Twitter que se allanaron las oficinas de la Dirección de Control Jurídico y Actuación Fiscal de la Fiscalía Provincial, edificio La Merced.

La dependencia judicial allanada está ubicada en las calles Víctor Manuel Rendón y Córdova, en el centro de Guayaquil y según el Twitter de la Fiscalía, la operación fue realizada para investigar presuntos actos de corrupción relacionados con la investigación del presunto femicidio de Lisbeth Baquerizo Muñoz.

En Twitt también se informa que en la diligencia se incautaron equipos electrónicos y teléfonos celulares de una funcionaria de la Institución.

"Con base en su política de cero tolerancia a la corrupción, personal de #FiscalíaEc, liderado por la Dirección de Transparencia en la Gestión, allana oficinas de la Dirección de Control Jurídico y Actuación Fiscal de la Fiscalía Provincial, edificio La Merced", indica el comunicado emitido por la Función Judicial.

Este Diario conoció que el allanamiento se realizó aproximadamente a las 17:00.

Horas antes el comandante de la Zona 8 de Policía, general César Zapata informó que la madrugada del jueves 12 de enero, la Policía y Fiscalía debía allanar tres domicilios, uno en Portete, otro en Sauces y un tercero ubicado en una urbanización de la vía a la costa, pero por orden del Fiscal que lleva la investigación del asesinato, la vivienda de los padres del presunto femicida, ubicada en una urbanización de la ciudad porteña, no fue intervenida.

"En Puerto Azul no se llevó a cabo el allanemito porque el fiscal indicó que el guardia le habia dicho que todo estaba cerrado, al llegar, la Policia lo que hizo es verificar que todo estaba cerrado. Hemos cumplido la disposición de la Fiscalía", aseguró el comandante zonal.

Ese mismo día, en una entrevista concedida a EXTRA Katty Muñoz, madre de la joven asesinada, pidió más celeridad en la investigación por el asesinato de su hija. "Pienso que se filtró información, que alguien les avisó, ya no sé que pensar, solo pido justicia", expresó la dolida progenitora.

Baquerizo de 30 años, fue hallada sin vida junto a la escalera de su domicilio. Luis Hermida, su esposo y los padres de este le aseguraron a los padres de Lisbeth que se trató de un accidente casero y que la causa del deceso había sido accidental, mas la autopsia reveló que se trató de una muerte violenta.