La tía de los bebés que habrían sido asesinados en Cayambe, al norte de Quito, doblaba las medias que usaban los pequeños para guardarlas en un clóset.

Esas prendas de vestir solo serán un recuerdo para la familia Inlago, luego de la desgracia ocurrida la tarde del viernes 28 de junio, en la comunidad San Miguel del Prado, una zona rural ubicada a un costado de la vía a Otavalo.

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Los más pequeños de la casa, los más queridos del hogar, fueron encontrados sin vida encima de la cama. El caso es indagado por la policía y se presume que el responsable del doble crimen sería su propio padre.

Ramiro Inlago, abuelo de las criaturas, recuerda que a las 13:00 del viernes fue a dejar unas cervezas a Cayambe porque él las distribuye. Estaba en contacto con su hija por mensajes de audio vía WhatsApp.

Ella le contó que el cliente le había llamado para decirle que estaban esperando a su padre con el producto y preguntaban la razón de por qué no llegaba. Ramiro le indicó que le devolviera la llamada y le dijera que volvería a las 15:00. A los 10 minutos, su hija le envío un audio en el que le pedía auxilio.

El señor regresó lo más rápido que pudo a su casa y vio que su hija estaba llorando. Lloraba en estado de shock y señalaba el cuarto donde descansaban sus nietos. Ramiro entró y vio que ninguno respondía a sus llamados. “Los amarqué para saber qué pasaba y me di cuenta de que estaban muertos”.

Llamaron al ECU 911 para reportar la emergencia. Cristian Cusme, analista de comunicación del Cuerpo de Bomberos de Cayambe, indicó que a las 15:00 recibieron la alerta de que había dos niños inconscientes. Un grupo de paramédicos llegó al sitio y confirmaron la muerte de los gemelos. Además, se percataron que la madre tenía marcas en su cuello y una herida en la nariz.

La víctima les comentó que tres sujetos habían aprovechado el momento en el que ella salió a cortar la hierba para entrar a la casa.

Cuando la joven regresó fue sometida por los desconocidos, quienes la habrían golpeado e intentado asfixiar con el cable del cargador del celular. Los tipos se fueron y la madre se percató que sus hijos habían sido asesinados.

Byron Inlago, tío de los menores de edad, presume que el padre de los gemelos sería el responsable del doble crimen. Según él, el sujeto maltrataba a su hermana y se separaron hace más de cinco meses.

El pariente mencionó que en marzo de este año denunciaron a las autoridades de la comunidad que su cuñado quería asesinar a su ñaña, porque este supuestamente la golpeaba constantemente y la mantenía amenazada de muerte.

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Ramiro también cree lo mismo y añade que el supuesto cliente que le compró las cervezas no existe y solo fue un engaño para que él saliera de la casa y dejara sola a sus hijas con los gemelos.

Los cuerpos de ambos fueron velados en su casa y serán enterrados en cementerio de la parroquia Ayora. Ramiro no entiende cómo pueden asesinar a dos niños que tenían la vida por delante. “Que encuentren a los responsables que provocaron una desgracia en nuestra familia”.

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