Ángel Mena recordará por siempre el estadio Monumental de Barcelona. Cuando estaba en Emelec, los hinchas azules le decían el ‘Menamental’, desde aquel 27 de noviembre de 2016, cuando el Bombillo ganó el Clásico 2-1 con anotaciones de Mena que alargaron la definición del torneo, el cual al final ganaron los amarillos.

Cosas del fútbol, el mismo estadio lo terminó aplaudiendo en su despedida de la Tricolor.

“Cariño y respeto, agradecido con el país. Me voy con el deber cumplido. Cuando jugué, lo di todo, y cuando no pude hacerlo, lo apoyé”, dijo un emocionado Mena, que ante Bolivia, jugó y estuvo cerca de hacer un gol.

Siempre junto a su familia

Mena es uno de los jugadores más correctos. Del Monumental se llevó una placa y una camiseta con el número 61, por los partidos que tuvo en la Tricolor.

Cuando periodistas de farándula le preguntaron qué sentía al dejar su estadio, el ‘Menamental’, Ángel, de manera muy serena, contestó: “No, no hay que decir así, primero hay que respetar”. Esta respuesta dejó a todos helados.

Ángel le dijo adiós a la Tricolor en el día en que todos sus compañeros usaron la camiseta número 15 en su espalda con el apellido Mena.

La misma cancha donde Mena, cuando estaba en Emelec, hizo llorar a los barcelonistas con sus goles, fue la misma que le sacó lágrimas de gratitud.

Sobre la goleada ante Bolivia y su despedida, dijo: “Fue algo maravilloso, y qué mejor con la victoria. Todos estamos felices. Solo quiero agradecer a todos los que han tenido tanto cariño para mí”.

Ángel Mena seguirá jugando en su club, el Pachuca de México. La idea del ecuatoriano es poder llegar a jugar la Copa Confederaciones en Catar 2024 y el Mundial de Clubes 2025 en Estados Unidos.

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