Caminaba por la calle con el féretro de su hija en brazos. Era una caja blanca pequeña. Así vieron unos moradores de una comuna de Ibarra, provincia de Imbabura, a la madre de la bebé que murió porque habría sido golpeada por su papá.

Unos conocían lo que sucedía en su casa. Incluso, hace unos nueve días, uno de ellos grabó un video donde se escuchan gritos.

La tía materna de la chica, quien vive a pocos metros de la casa, a finales de diciembre de 2019 reportó a la policía  los maltratos hacia su pariente.

Aquella vez, agentes llegaron al sitio y quien abrió la puerta fue su pareja, de 22 años, ahora detenido. Él les dijo que no sucedía nada.

Pese a que la tía de la jovencita insistía en que ella era golpeaba, la afectada dijo a los policías que todo era mentira. Los uniformados se marcharon. Este uno de los antecedentes que los vecinos recuerdan de lo que ocurría en aquella casa.

Cuando la niña nació, madre e hija habrían sido agredidas. El último lunes la bebé de tres meses habría sido golpeada con un objeto en la cabeza, pero su padre insistió en que se cayó de la cama.

La infante fue llevada al Hospital San Vicente de Paúl, en la capital imbabureña, pero por su delicado estado de salud la derivaron al Hospital Baca Ortiz de Quito, donde  falleció horas después.

La autopsia reveló que la muerte de la menor de edad fue provocada y el cráneo estaba destrozado. Sus restos fueron sepultados en la provincia de Esmeraldas, donde se encuentra la familia materna.

Después del examen legal, el padre de la pequeña víctima, quien se dedicaba a labores agrícolas, fue arrestado y ahora es investigado por el presunto delito de femicidio en contra de su hija.

Antes de doloroso suceso, el morador que grabó el vídeo tenía la intención de llevarlas a las autoridades de la comuna para hacer la denuncia. Ahora piensan que si se lo hubiera hecho, se habría evitado el deceso de la pequeña.

La joven madre habría alegado al personal de la Dinapen que recibía constantes amenazas de muerte de parte de su pareja si es que lo denunciaba.

Afectada por el miedo

La psicóloga María Belén Pineda dijo que por lo general, el miedo paraliza y no deja actuar a las víctimas de violencia. Además influye una dependencia emocional.

“Las víctimas por lo general no actúan por temor... Dicen ‘no denuncio porque él me va a agredir, va a matar o me tiene amenazada’, por eso hay femicidios”, indicó la profesional. (MR)