Los andenes repletos, gente molesta y reclamando por no poder movilizarse. Ese escenario marcó la jornada del 19 de junio en el metro de Quito. En principio no había explicaciones. En la mañana, en plena hora pico, los trenes empezaron a circular más lento. En algunos tramos hasta se pararon, según los usuarios, y tardaron varios minutos en avanzar. Sobre todo en las paradas entre El Recreo y La Magdalena, en el sur.

“Tardó en llegar 20 minutos el tren. En total me demoré una hora en llegar a mi destino”, reclamó Paúl, un estudiante universitario.

Las quejas de los usuarios no tardaron en ‘inundar’ las redes sociales, junto a fotos de las largas filas. “No lleva un año y ya tiene problemas de servicio”, dijo Jefferson Galindo en una publicación de X. Algunos debieron salir de las paradas para buscar otro tipo de transporte, ante la desesperación.

A eso de las 07:00, la empresa Metro de Quito emitió un comunicado en el que atribuía la demora a una “condición de vía detectada entre las estaciones Recreo y Cardenal de La Torre”. Más tarde explicaron que se trató de una “afectación a las agujas de piñón, es decir elementos en los rieles en el tramo mencionado, correspondientes al sistema de señalización ferroviaria, cerca de la estación Recreo”.

Esto se mantuvo por varias horas, y aunque disminuyó el flujo de usuarios, la molestia persistió. “Deberían avisar con tiempo en cuanto uno ingresa a la estación”, expresó Ana Silva, quien se trasladó desde la Universidad Central hasta El Recreo.

Orlón Duarte comentó que no llegó atrasado a su trabajo porque salió media hora antes de su casa. “Ayer (martes) yo ya tuve inconvenientes. El tren iba muy lento en ese tramo y llegué 15 minutos tarde”, manifestó.

Aproximadamente al mediodía se difundió un nuevo comunicado, en el que se informaba que todo había vuelto a la normalidad. “La empresa encargada del mantenimiento del sistema de señalización ferroviaria detectó el error y reemplazó el componente afectado”, informaron.

Metro de Quito insistió en que se trata de temas normales en sistemas de transporte ferroviario. “Son errores residuales que pasan de manera cotidiana durante la operación”.

Por su parte, Andrés Campaña, concejal de Quito, dijo que “sin mantenimiento del metro hay menos trenes operativos y más problemas en la red ferroviaria. Con ello, mayor tiempo de espera y aglomeración de pasajeros”. Esto en referencia a la urgencia de los tres contratos de mantenimiento preventivo y correctivo, que no se han concretado.

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