El Chapito se encuentra aislado. Lejos de la población penitenciaria del Centro de Privación Provisional de Libertad (CPPL) El Inca, en el norte de la capital.

Desde que Brayan Rodríguez Alcalá, de origen mexicano, fue detenido la noche del lunes porque estaría involucrado con el Cártel de Sinaloa, su estadía ha sido en una celda reservada. Estaría ubicada en el área administrativa de la prisión, a unos 10 metros de los pabellones.

Así lo indicó un agente policial que custodia el área. Añadió que la orden es que permanezca en el lugar por 40 días, hasta que Estados Unidos tramite su extradición.

Desde el Ministerio de Gobierno no se dará ninguna información del reo hasta el día que tome el vuelo con dirección a la ‘Yoni’. Por ahora el objetivo, según la cartera de Estado, es que el procesado entregue información clave a las autoridades ‘gringas’ para desmantelar parte de la estructura a la que representa. Por el momento se maneja como un caso de seguridad nacional.

Querrían callarlo

Debido a ello, extraoficialmente se conoce que el Chapito habría sido amenazado de muerte. Al parecer, por mafias mexicanas que no quieren que suelte información.

A pesar de la magnitud del caso el único protocolo aplicado (y que se ha hecho público) ha sido notificar de la aprehensión de Rodríguez a las autoridades penitenciarias, de la Defensoría del Pueblo y policiales, tanto nacionales como extranjeras.

En cuanto a medidas de seguridad adicionales para manejar este tipo de situación, no se ha visto algún cambio ni fuera ni dentro del CPPL. Todo se ha desarrollado con normalidad.

Es más, ayer se disputó un campeonato deportivo entre equipos de 10 pabellones, según el Servicio Nacional de Atención a Personas Privadas de la Libertad (SNAI). El ente subió una foto de los internos jugando ecuavóley e informó, en redes, que Fausto Cobo, director del SNAI, fue quien propició estas actividades.

Amistad o ‘plomo’

Mientras los internos hacían deporte, Fanny Arteaga esperaba afuera del CPPL a que su esposo saliera, luego de estar un mes recluido. Al enterarse de que adentro está preso un miembro del Cártel de Sinaloa, la mujer se preocupó. Dijo que deberían incrementar el contingente policial y militar.

Diego Pérez, experto en seguridad y docente del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), está de acuerdo con que deberían mejorarse los protocolos de manejo de estos casos. Porque el mexicano, al ser un reo de alta peligrosidad, no solo podría escapar, sino que sufriría un atentado por parte de bandas rivales.

El experto añadió que la estadía en prisión podría ser aprovechada por el Chapito para “vincularse con los líderes y las operaciones de otras organizaciones criminales”. 

Otros capos detenidos

Según la Policía, desde 2018 hasta mediados de este año han sido detenidos 64 mexicanos relacionados con delitos de narcotráfico.

Sin embargo, en los últimos años han aparecido personajes vinculados al Cártel de Sinaloa, como el exmilitar Telmo Castro, quien era responsable de las operaciones de narcotráfico a gran escala y fue asesinado en la Peni en 2019.

Otro capo importante fue Washington Prado, alias Gerald, quien entregó el control de las rutas de Colombia y Ecuador a la organización mexicana. Hoy cumple una pena de 19 años en una cárcel de EE. UU.