Con una camisa blanca, un pantalón azul y una corbata de lazo llegaron a Cuenca, provincia del Azuay, los hermanos Rosero Chipe para retirar a su hermano José David, de 18 años, víctima de la masacre en la mina Las Lomas, en el cantón Camilo Ponce Enríquez.

Al saber que su pariente estaba en la capital morlaca los hermanos viajaron, la noche del miércoles 14 de agosto de 2024, y desde temprano, la mañana de este jueves 15 de agosto, realizaron los trámites en el Centro Forense para sacar al hermano con la ropa que trajeron y llevarlo a Esmeraldas.

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Juan (nombre protegido) cuenta que su hermano, el menor de los diez, salió de Esmeraldas a Azuay para trabajar en las minas sacando oro. Él quería comprarle una casa a su mamá.

El 3 de julio, José Rosero cumplió la mayoría de edad. Según su hermano Juan, por la situación económica de su familia, José dejó el colegio en el primer año de bachillerato y se dedicó a trabajar en una finca y los fines de semana en la pesca, hasta que viajó a Ponce Enríquez.

Sobre la versión policial de que las víctimas eran miembros de bandas delictivas, Juan señaló desconocer si era el caso de su hermano.

Familiares de otras víctimas también llegaron al Centro Forense de Cuenca, donde fueron trasladado todos los cuerpos del ataque armado en el cantón azuayo. Estaban unos que intentaron reconocer a una de las víctimas calcinadas, pero evitaron hablar con la prensa.

Otros parientes llegaron en una furgoneta con un féretro listo para  trasladar los restos mortales de su pariente hacia la Costa ecuatoriana. Ellos también evitaron identificarse.

La policía afirmó que la cabeza hallada en la vía que conecta a los sectores de El Garrido y Tendales, en el cantón El Guabo, provincia de El Oro, es de uno de los decapitados en la masacre cometida en el cantón azuayo Camilo Ponce Enríquez.

Unos agricultores que se dirigían a una finca bananera, a las 09:40 de este jueves 15 de agosto, vieron una cabeza que estaba a medio quemar. Al parecer, los asesinos han querido incinerarla, pero por las condiciones del clima no cumplieron ese objetivo.

Jhonny Guilpa, jefe de la policía de El Guabo, mencionó que sería de una de las víctimas de Camilo Ponce Enríquez, donde asesinaron a seis personas y a dos de ellas las decapitaron.

La cabeza hallada en El Guabo, este jueves 15, es de Adrián Leonardo Bailón Muñoz, mientras que la encontrada cerca de un colegio de Machala, el miércoles 14 de agosto, es de Walter Javier Cortez Grueso. La cabeza será trasladada al Centro Forense de Cuenca, donde analizaron  los cuerpos del ataque en la mina. (FC)

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