La ola delincuencial en Ecuador se encuentra asociada al tema de las drogas y normalmente quienes se dedican a las actividades ilícitas son consumidores o expendedores. ¿Pero hacen algo las autoridades para atacar el problema de venta y consumo de sustancias ilícitas? En Guayaquil proliferan las clínicas de rehabilitación clandestinas para los consumidores de alcohol y estupefacientes, ante la falta de centros de rehabilitación legalizados. Y como vivimos en la tierra de ‘los sabidos’, algunos aprovechan esta carencia y montan su ‘cualquier cosa’ para sacar billete.

No es nuevo escuchar sobre tragedias en estos centros clandestinos, sobre todo de incendios, debido a que en estas villas convertidas en ‘lugares de salvación’ sus pacientes, al no recibir un tratamiento adecuado y no poder lidiar con el síndrome de abstinencia, llegan incluso a atentar contra su vida con tal de salir de ese lugar y conseguir algo de droga. Para ellos, prender colchones es una manera de llamar la atención. Ya varias muertes han ocurrido en estos sitios improvisados y hasta la fecha no se ha podido dar fin a tan delicada problemática.

La falta de profesionales preparados en estos centros hace que los tratamientos no sean los correctos. Esto es un llamado de atención a nuestras autoridades para que implementen un censo a estas clínicas ilegales de rehabilitación y con la ayuda de una buena capacitación y poniéndolos en regla poder darles las herramientas necesarias, para que así ofrezcan un tratamiento correcto a quienes desean salir del tenebroso mundo de la adicción.