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El sepelio se hizo en la ciudad de Puyo, a donde la joven fue llevada para intentar salvarle la vida.Cortesía

Muerte en Pastaza: “Mi papá la ahorcó y le dio veneno”

Una mujer fue asesinada presuntamente por su pareja. Uno de los hijos de la fallecida atestiguó lo que ocurrió. 

Zoila Castillo recibió una llamada alarmante. Su sobrina Andrea Gualinga, de 21 años, agonizaba en el hospital de Puyo, Pastaza. “La primera hipótesis era que ella se había tomado veneno. Lo que creímos fue que quizá discutió con su marido y, por el despecho, ella se envenenó”, contó Zoila.

Sin embargo, uno de los tres hijos de la joven contó lo ocurrido.

“Mi mami no está así de gana. Mi papá la ahorcó con la correa y le dio veneno”, relató el infante sobre su progenitora, quien tenía los riñones y el hígado dañados por la sustancia.

Lo ocultaron

Ayer se cumplió el quinto día del deceso de Andrea. Su tía Zoila detalló que la muerte fue el 31 de julio, a las 15:00, aunque el ataque se habría dado entre el 11 o 12 de julio, en la comunidad San Jacinto, a escasos kilómetros de Puyo.

“Pensamos que el marido, primero, la golpeó y después pasó lo que contó el niño”, afirmó la pariente, quien supo que el veneno que la obligaron a tomar fue un herbicida que se usa contra la maleza.

Zoila Castillo dio detalles sobre lo que pasó con su sobrina, de 21 años.Cortesía

Y pese a este supuesto ataque, Andrea habría sido retenida dentro de su vivienda. Zoila indicó que ni la suegra u otros parientes del marido, Darío Chango, hicieron algo para salvarle la vida. “Yo creo que quisieron tapar lo sucedido. Esas personas solamente habrían dicho que se murió y nada más”, recriminó la tía de la joven.

Pero el 16 de julio, una allegada de la víctima se ‘apiadó’ y la embarcó en un vehículo para que la llevara a un centro de salud de la comunidad Madretierra. “La enfermera de ese lugar la vio bastante mal y la trasladaron hasta el hospital de Puyo”, confirmó Zoila.

Larga agonía

Desde su ingreso, las posibilidades de sobrevivir eran escasas. Mientras la atendían, Zoila se enteró de que no era la primera vez que Andrea era agredida por Darío. “Incluso puso una denuncia, pero no sé por qué no salió de esa casa”.

Ahora, el implicado está prófugo y ya se puso la denuncia por este aparente femicidio. “La gente dice que en la casa donde estaba este hombre, ya no hay nadie”, contó la tía, a quien Zoila le pidió que velara por sus retoños, de 2 y 6 años, y su bebé de 5 meses.

Los infantes están a cargo de su abuela materna. Pero es Zoila la que también está pendiente de su cuidado, como lo estuvo de Andrea, cuya larga agonía terminó tras 15 días. Ahora reposa en el cementerio de Puyo.