Un sueño cumplido. Así se puede resumir a la primera estrella de la Superliga alcanzada por Ñañas, como premio a un proceso que además de brindarle esta gran alegría, ha aportado al crecimiento del fútbol femenino del país.

El cuadro rosa, con la victoria por 3-1 sobre Dragonas de Independiente del Valle, cumplió con un anhelo que le fue esquivo en las tres ediciones anteriores del torneo, donde cayó en las finales. Ahora se quitaron esa ‘espinita’ y la emoción del deber cumplido se reflejaba en las lágrimas de las jugadoras.

La goleadora Karen Páez fue una de las más conmovidas. En su tercera temporada con Ñañas alcanza la corona, esa que en los torneos pasados vio desde la otra vereda alzar a sus rivales. 

“Teníamos claro que este era nuestro año. Las tres finales anteriores formaron parte de un proceso que nos ayudó a conseguir este título”, comentó la delantera colombiana que aportó con 16 goles, dos de ellos en la gran final.

Su compatriota Maireth Pérez, quien marcó el otro tanto de Ñañas, también lloraba de la felicidad. Con Ámbar Torres y Páez conformaron un temible tridente en el torneo.

“Tantos años de sacrificio, de lucha, de ir en contra de todo para conseguir este objetivo”, confesó. Resaltó que es un orgullo ser campeona de la Superliga, algo que contó se lo prometió al entrenador Francisco Ramírez cuando llegó hace dos años al conjunto capitalino.

La estrella y el jugar la Copa Libertadores será el broche de oro al paso de Pérez, quien indicó que la próxima temporada no seguirá en Ñañas.

La mundialista Ámbar Torres también enfatizó en los sacrificios realizados por las jugadoras, cuerpo técnico y dirigentes para formar un proyecto sólido, que no solo se preocupa de los resultados deportivos, sino también de las formación integral de las deportistas.

La volante dedicó el campeonato a sus padres y hermanos, de los que dijo ha tenido que estar lejos para cumplir su sueño de ser futbolista, antes que le ganen las lágrimas.

GRAN FIESTA

En la cancha del estadio Banco Guayaquil, los abrazos, los saltos y las camisetas al aire formaban parte de las celebraciones de las chicas mientras se daba forma a la ceremonia de premiación.

Las flamantes campeonas, entre gritos y bailes, esperaron su turno para recibir las medallas. Pero el punto de mayor euforia se dio al levantar el trofeo de la Superliga y empezar la tradicional vuelta olímpica. Las fotos con la copa no podían faltar para tener el recuerdo de esta conquista.

Las celebraciones pasaron del césped a una chiva donde las chicas viajaron hasta el lugar donde compartirían con familiares, amigos y directivos. En el recorrido las futbolistas sacaron sus mejores pasos de baile y saludaban a quienes se encontraban en el camino. Las transmisiones en vivo en redes sociales tampoco faltaron, al igual que las bromas y muestras de cariño entre las jugadoras. 

Al llegar al lugar de la fiesta fueron recibidas con pirotecnia y al son de la canción ‘We Are The Champions’. Un reconocimiento al esfuerzo no solo de esta temporada, de tantos años de lucha desde el amateurismo hasta ser un referente en el país, pese a no contar con el respaldo de un club masculino a sus espaldas.

UN 'ÚLTIMO BAILE' MÁGICO

Todo salió a la perfección para Ñañas en la gran final de la Superliga, que serviría como despedida de las canchas de Fernanda Vásconez, fundadora del club capitalino. El tercer gol de Karen Páez, a los 83 minutos, les aseguraba el título y permitía el ingreso de Vásconez en lugar de Maireth Pérez, quien fue designada la mejor jugadora del partido.

“Tengo tantos sentimientos dentro. Alegría, amor, satisfacción. Ni siquiera si lo hubiera escrito habría salido todo tan perfecto. Agradezco a quienes formaron parte del camino. La vida es un proceso y nosotros creemos en ellos”, destacó Fer.

La volante fue la encargada de emitir las palabras de aliento a sus compañeras en el camerino, donde se puso feliz al vestirse nuevamente de corto, algo que no había hecho desde el anterior torneo. “Es un retiro soñado, es perfecto. Les dije a las chicas que iba a trabajar desde fuera y que levantaríamos esta copa juntas, y se dio”, confesó Vásconez.

EL PREMIO 'GORDO'

Uno de los pilares del éxito deportivo de Ñañas es el entrenador Francisco Ramírez, quien se encargó de ir formando al plantel que ahora es el mejor del fútbol ecuatoriano. El estratega nacional nunca se conformó con los tres vicecampeonatos alcanzados en la Superliga y siempre motivó a sus pupilas para que sigan creciendo y alcancen el título.

Conformó una plantilla que conjuga la experiencia de jugadoras como Andrea Vera, Merly Zambrano y Ámbar Torres, entre otras, con jóvenes talentos como Jessy Caicedo, Analiz Zambrano o María Bravo.

También acertó en la incorporación de refuerzos extranjeros como las colombianas Maireth Pérez y Karen Páez, que se acoplaron a su idea de juego. Además, estuvo atento al crecimiento de las divisiones formativas del club, que también cuenta con un equipo para personas con discapacidad.

La corona es un reconocimiento al trabajo de Ramírez, quien fue designado como el mejor entrenador de la cuarta edición de la Superliga.

Terminó con el reinado de Wendy Villón, quien le arrebató el título en tres ocasiones al mando de Deportivo Cuenca y El Nacional, y que en este año, en el banquillo de Barcelona, cayó ante su colega en las semifinales.

Pancho, como de cariño le dicen las jugadoras, siempre mantuvo la calma en las finales y con orgullo tomó el trofeo para dedicarlo a la hinchada que les acompañó en el estadio Banco Guayaquil y a sus familiares que han sido su gran apoyo.

Junto a su cuerpo técnico ahora se enfocan en llevar a sus chicas a que sean protagonistas en la Copa Libertadores.

CON LA MIRA EN LA LIBERTADORES

Tras unos días de descanso después del esfuerzo en las finales del torneo nacional, los planteles de Ñañas y Dragonas retomarán los entrenamientos al finalizar esta semana para pulir detalles de cara a su participación en la Copa Libertadores. Los clubes jugarán en casa el torneo y apuntan a dar pelea para llegar hasta instancias finales. 

Ñañas, como campeón nacional, forma parte del grupo B con Boca Juniors de Argentina, Ferroviaria de Brasil y Defensor Sporting de Uruguay. Una llave fuerte en la que se estrenará ante el cuadro brasileño, el 13 de octubre, en el estadio Banco Guayaquil. Sus otros dos encuentros, ante las argentinas y charrúas, también serán en el escenario de Chillo Jijón.

Por su parte el conjunto de Independiente del Valle está en el grupo C con Palmeiras, U de Chile y Libertad Limpeño. Su primer juego será ante las chilenas, el 14 de octubre en su estadio, donde también medirán a las cariocas.

Solo saldrán de su reducto para enfrentar a las paraguayas, en el estadio Gonzalo Pozo Ripalda, en el cierre de esta fase.