Fue la primera vez que tres equipos ecuatorianos llegaban a los octavos de final de la Copa Libertadores y las posibilidades de tener a uno o varios representantes tricolores entre los ocho mejores de América eran grandes. Pero con el desarrollo de las llaves, la ilusión se convirtió en pesadilla.

Liga de Quito, Independiente del Valle y Delfín no lograron ganar en casa y eso les pasó factura al quedar eliminados de la Copa.

Para Polo Carrera, exseleccionador nacional, el no hacer respetar la localía fue un factor clave para la eliminación de los equipos ecuatorianos.

“En años anteriores era difícil que nos ganen de locales. Habrá que tomar rectificaciones, en estas instancias decisivas se paga caro no sacar ventaja en casa, ya que se vuelve complicado ir a buscar la clasificación como visitantes”, afirmó el exjugador albo.

Agregó que otra situación que complicó, especialmente a universitarios y rayados, fueron las bajas por positivos de COVID-19 y por lesiones. “Cuando regresaron elementos que son titulares, los equipos mejoraron, como demostró Liga en Brasil”, manifestó.

Humberto Pizarro coincide en que las ausencias fueron determinantes. Aunque pone sus particularidades. Según el entrenador nacional, Liga fue el más afectado por las bajas, ya que en la ida fueron seis y en la revancha cinco.

LE TIENEN MEDIDO

Carrera dijo que en el caso del Independiente “sus rivales le conocen su esquema de funcionamiento y lo controlan evitando ese fútbol explosivo que lo caracterizaba. Tiene que cambiar su forma de jugar”.

Pizarro complementó este análisis argumentando que “Independiente no ha tenido un buen pasaje en esta segunda parte del torneo local, ha recibido muchos goles. Si bien ante Nacional corrigió y no le marcaron apareció otro problema: la ofensiva. Lastimosamente en el ataque falló mucho. Nacional se defendió y confió en que los penales iban a jugar a su favor”.

Con estas críticas no concuerda el técnico Miguel Ángel Ramírez, quien defendió lo hecho por los rayados y enfatizó que “da gusto verles jugar a los chicos. Creo que el futuro es prometedor para Independiente y para la selección ecuatoriana”.

SIN RESPUESTAS

Sobre el Delfín, Carrera manifestó que se evidenció la superioridad de Palmeiras en una llave que terminó 8-1 a favor de los brasileños. Pizarro, por su parte, dijo que lo de los manabitas “fue una buena experiencia. No hay más para rescatar ahí”. 

Tras la dura eliminación copera, el argentino Miguel Ángel Zazhú fue cesado como entrenador del cuadro manabita. En su lugar queda su asistente técnico, Horacio Montemurro, para las últimas cinco jornadas de la LigaPro.

Zazhú, que duró dos meses y medio en el cargo, es el tercer timonel que pasa por el cetáceo, tras el español Ángel López y el argentino Carlos Ischia, en lo que va de esta irregular temporada.

Para Carrera, esta inestabilidad es otro de los factores que afectaron al Delfín, ya que “no se cuenta con un esquema táctico definido, una estructura estable y así es difícil conseguir buenos resultados”.