Darwin Quintana fue el asistente técnico de Barcelona en la última semifinal de Copa Libertadores que el Ídolo jugó en el 2017. Ahora trabaja en Santos de México, junto al entrenador Guillermo Almada.

En su época de jugador, en 1993 actuó en la Libertadores con el Peñarol, pero dice que estar en una semifinal “es otro nivel, algo único”. Desde Torreón, México, Quintana le asegura a EXTRA que el partido ante Flamengo es remontable y que es vital tener el plus del regreso de la hinchada.

- Vivió una semifinal y ahora Barcelona está en la misma etapa de la Libertadores.

Lo que pasa es que son momentos diferentes, pero es una experiencia única. La que nos jugamos en 2017 fue distinta. Allá ganamos (Brasil). Fue algo que nunca olvidaremos, cuando llegamos estuvimos varados en Bolivia. Arribamos el mismo día del partido, ganamos y no nos alcanzó.

El Barcelona 2021 tiene grandes jugadores, como Matías, Díaz, que han vivido esas situaciones. El profe Fabián Bustos, que ha estudiado a los rivales, sabe lo que tiene Barcelona en ese sentido.Será un partido muy duro y al Flamengo le va costar.

- Barcelona se hace fuerte en el Monumental, no ha perdido en su casa.

Eso se construye partido a partido y Barcelona lo ha hecho. Al jugador amarillo le gusta el Monumental, es uno de los estadios más bonitos, es la casa del Ídolo y de su gente, el jugador se siente cómodo.

- ¿El estadio con hinchada impresiona al rival?

Barcelona pasó una fase de grupos en la que nadie daba nada por el equipo... Hoy, de local es enérgico. El aliento será importantísimo, porque será el jugador número 12 ante Flamengo.

- Sobre la diferencia económica entre Barcelona y Flamengo se habla mucho, ¿qué tanto pesa eso?

A la hora de jugar se emparejan todo. Fuera de la cancha se habla mucho de eso, Flamengo tiene individualidades con jugadores carísimos que pueden decidir un partido, pero lo colectivo es otra cosa, eso se debe mostrar en la cancha. Aquí es un 50 a 50 o 60/40. Barcelona al jugar en casa es distinto y equiparable.

- Es la vuelta de la hinchada al Monumental, ¿cómo la ve?

Ya estábamos acostumbrados a que no haya público, se escuchaba hablar a los jugadores, al cuerpo técnico contrario, se iba volviendo algo normal y eso está mal. Cuando regresó la gente se sintió la diferencia, eso nos pasó con Santos (en México) cuando jugamos de local. Fue un plus porque el equipo dio todo, ganamos y se evidenciaba el entusiasmo, era otra la fiesta. Esa alegría de saber que la hinchada estaba presente fue motivante, porque la fiesta estaba completa con los fanáticos y no tengo dudas de que pase lo mismo en el Monumental.

- Flamengo esperaba golear en Brasil, pero no se dio.

Escuché los comentarios del primer tiempo y no era real el marcador, por las situaciones que se dieron y cómo llegó Barcelona.

- ¿Es remontable ese 2-0 en el Monumental?

Se me mezcla un sentimiento con deseos y realidades. El anhelo de que Barcelona llegue en la final me encanta, pero hay que ser objetivos, Barcelona tiene equipo y puede dar la vuelta al marcador en el Monumental. Tiene un buen plantel y la presencia de los hinchas es importante. Hay chance de pasar a la final.

- ¿Estos partidos marcan la vida de jugadores y entrenadores?

Eso es verdad, la Copa Libertadores es hermosa. En mi caso jugué una fase en Peñarol, fue en 1993, pero estar en una semifinal y enfrentar a equipos brasileños es otra cosa, algo inolvidable. En el 2017, nadie daba nada por Barcelona, pero lo que sucedió fue algo impactante. Jugar de local con el estadio Monumental lleno es increíble. También actuar de visitante con toda la gente en contra es lindo.

La Copa tiene un plus y es como una guerra, nadie quiere perder nada. El sentir a la gente que te canta y las llegadas a los estadios son situaciones muy motivantes. La hinchada amarilla debe de hacer su parte en esta fiesta.