Luego de que Diario EXTRA publicara este viernes 1 de marzo que el interventor puesto por la FEF, Ricardo Muñoz, tendría un estrecho lazo de amistad con Antonio Álvarez (presidente aún no inscrito de Barcelona) y de que el primero incluso no cumpliría con algunos de los requisitos necesarios para ocupar ese cargo, la dirigencia prefirió guardar silencia, en lugar de resolver los cuestionamientos.

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Este viernes en rueda de prensa en el estadio Monumental, Álvarez se limitó a decir que han conversado con el interventor y acatarán sus disposiciones.

“Él quiere colaborar y que todo salga de la mejor manera así como nosotros. Vamos a seguir trabajando, Barcelona no está solo... el interventor entiende muy bien las urgencias que tiene Barcelona. Hoy lo que le ingresa a Barcelona es para las colas, no alcanza ni si quiera el 10% de sus responsabilidades mensuales”, dijo el dirigente.

Además, quien también se presentó en la sala, Raúl Chávez ratificó lo antes mencionado, añadiendo que han hecho algunas solicitudes que deberán ser cumplidas por Ricardo Muñoz. “Hemos planteado que se adelante esa asamblea de socios planificada para el 30 de marzo, con el objetivo que ellos (socios) puedan decidir y resolver de manera integral”, manifestó Chávez.

Por otro lado, Álvarez aclaró que la plantilla se ha ido registrando de manera adecuada en la Federación Ecuatoriana de Fútbol, esto, una vez que se dio el nombramiento de Muñoz. “Los jugadores están siendo inscritos desde ayer (jueves) y no ha habido problemas con eso y lo seguimos haciendo porque el sistema es un poco lento pero vamos bien”, expresó Antonio.

En la rueda de prensa también estuvieron, Xavier Salem y José Luis Nogales, miembros del directorio. Ninguno de los antes mencionados se refirió a una relación de amistad con el representante legal impuesta por FEF, Ricardo Muñoz.

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