Exclusivo
Buena Vida

En el bosque de frutas existen plantas cultivadas con productos orgánicos.Yadira Illescas

Tisaleo: Cosechan frutas con técnicas ancestrales

En una quinta elaboran los nutrientes y también los pesticidas con productos naturales, con los cuales obtienen productos más ecológicos

El aroma de las manzanas y peras atrapa, y es cautivante ver las ramas de los árboles cargadas de las jugosas frutas. El desaliento y las malas vibras también se disipan en el aire, al recorrer el bosque de La Delicia, en Alobamba, parroquia del cantón Tisaleo, provincia de Tungurahua.

En una hectárea de terreno, Luis Arturo Coello sembró, hace una década, sus cultivos de frutas tradicionales, pero empleando conocimientos que datan de la antigüedad.

Así, en la quinta, ubicada en la Panamericana Sur, este emprendedor desarrolló su proyecto, pero considerando fechas, fases de luna y otros conocimientos vigentes en siglos pasados.

María Cocha es una de las que ayuda a mantener el huerto para que siempre esté agradable a la vista de los visitantes. A cada planta “se debe atender como si fueran mujeres embarazadas”, expresó.

Según explicó, la poda de los árboles la hacen en cierta fecha del calendario andino, así como la desinfección y la colocación de los nutrientes a cada árbol.

En este predio elaboran sus productos para cuidar sus cultivos. Lo hacen de manera artesanal y ecológica, procurando evitar en lo posible emplear químicos.

Ellos elaboran los fertilizantes y también herbicidas con desechos animales y de las mismas plantas.

Con heces, desechos de las plantas y productos naturales hacen abono.Yadira Illescas

Suelen preparar insecticidas con ají, ajo, vinagre. Inclusive las mismas frutas y hojas que se caen son utilizadas para nutrir el suelo. Mientras que con las heces de los cuyes, gallinas y las de ganado vacuno elaboran el abono.

“Cultivamos lo que comemos y sabemos que no nos hace daño al organismo, porque están libres de químicos. La naturaleza es bondadosa y da todo para las plantas, solo se debe tener paciencia porque producir de manera ecológica lleva más tiempo”, sostuvo la experta en frutas.

En La Delicia han plantado diferentes especies, como cinco variedades de manzanas. De entre los 230 árboles de esta fruta que tienen existe una clase que lleva el mismo nombre de la quinta.

Además, poseen árboles de claudias, tres variedades de peras, así como uvillas, moras y fresas.

En este predio también cuentan con un área para cultivos de hortalizas y verduras orgánicas.

También cuentan con un espacio donde cultivan hortalizas y otros vegetales.Yadira Illescas
Enseñan proceso

Pero además de obtener sus productos, el emprendedor decidió compartir la forma de producir y fomentar un turismo campestre.

“A más de cosechar la fruta, a los visitantes también se les enseña los saberes ancestrales de la siembra”, sostuvo Luis Arturo Coello.

Esto lo ha incentivado en este tiempo de pandemia, en que muchas personas buscan hacer paseos entre la naturaleza.

Elsy Vásconez, una turista que se animó a conocer el bosque de frutas, manifestó que al ver los árboles cargados de frutas sintió “renovar sus energías”.

“La naturaleza es muy sabia y estoy segura de que por eso nuestros ancestros siempre vivían sanos porque se alimentaban y nutrían de toda la energía que nos brinda la tierra”, expresó la joven.

Miriam Coello aseguró que esta nueva normalidad en que vivimos debido a la crisis sanitaria ha hecho que las personas dirijan la mirada al campo. “Esta pandemia nos enseñó a valorar la familia y el fruto que nos brinda nuestra gente del campo. Debemos estimar más al agricultor”, acotó. (YIE)