Texas está enfrentando el brote de sarampión más grande en casi 30 años desde enero con 124 casos y 18 hospitalizaciones. Las autoridades de salud han confirmado que el virus se propaga principalmente entre comunidades con bajas tasas de vacunación. Además, Nuevo México también ha reportado varios casos en lo que parece ser una tendencia alarmante de propagación del virus.

El Departamento de Servicios de Salud del Estado de Texas confirmó que un niño en edad escolar, sin vacunar, falleció tras haber sido hospitalizado en Lubbock. "El niño en edad escolar que no fue vacunado fue hospitalizado en Lubbock la semana pasada y dio positivo en la prueba de sarampión", indicó la entidad en un comunicado.

Este fallecimiento se convierte en un hecho alarmante en la salud pública de EE.UU., ya que es la primera muerte por sarampión en el país desde 2015. La expansión del virus ha puesto en alerta a las autoridades sanitarias, ya que la mayoría de los afectados no están vacunados, lo que evidencia una disminución preocupante en las tasas de inmunización.

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Comunidades en riesgo

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han alertado que las tasas de inmunización han disminuido desde la pandemia de COVID-19, dejando a muchas comunidades por debajo del umbral del 95% necesario para evitar brotes. 

Las zonas más afectadas por el brote están en el oeste de Texas, donde se concentran comunidades con bajas tasas de vacunación. La comunidad religiosa menonita, en particular, ha sido identificada como un foco de infección debido a este motivo.

Expansión del virus

El sarampión es una enfermedad altamente contagiosa que se propaga a través del aire cuando una persona infectada tose o estornuda. Los síntomas incluyen fiebre alta, tos persistente, sarpullido y ojos irritados. Según los CDC, aproximadamente una de cada cinco personas infectadas requiere hospitalización y en casos graves puede provocar neumonía o inflamación cerebral.

El virus sigue propagándose a nuevos territorios, aunque el condado de Harris no ha reportado casos en sus áreas no incorporadas, ya se han detectado al menos dos contagios en Houston, lo que incrementa la preocupación de las autoridades.

Los expertos advierten que este brote podría extenderse a otras zonas. "Tenemos más de 20 cuartos que hemos habilitado en el Children’s Hospital, por si tenemos más pacientes, queremos asegurarnos de que todo esté óptimo para poder atenderlos sin que represente un riesgo para otros pacientes", informó el Departamento de Salud de Texas. 

Estados Unidos reportó 285 casos de sarampión en 2023 con un brote ocurrida en 2019, con 1,274 casos en Nueva York y Nueva Jersey, según los CDC. Aunque la enfermedad se consideraba erradicada en el país desde el año 2000, el sarampión sigue resurgiendo en comunidades con bajas tasas de vacunación.

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