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En horas de la tarde, los obreros seguían sacando escombros para reparar la pared dañada.Alex Lima

Guayaquil: Choque de bus deja casa sin fachada y a merced de los pillos

Los moradores aseguraron que una motocicleta tuvo parte de la responsabilidad en el siniestro.

Preocupada, porque a su casa le falta una pared y en el sector los pillos están al acecho. Así está Janeth Chillán, propietaria de una vivienda en el bloque 4 de Flor de Bastión, donde la mañana de este miércoles 2 de agosto un bus de la línea 160-4 se estrelló, dejando, además de los daños materiales, 5 personas heridas.

El hecho ocurrió a las 06:50 cuando, según los relatos de los moradores, el vehículo bajaba una loma a velocidad y “para evitar un accidente con una motocicleta y una camioneta, el bus se abrió bruscamente, perdió los frenos y se vino a estrellar derechito a la casa”.

Al momento del siniestro, el automotor circulaba con gran cantidad de pasajeros en su interior, la mayoría de los cuales resultaron ilesos o con golpes leves, por lo que se bajaron por su cuenta para continuar con sus actividades. Solo cinco personas, incluido el conductor del bus, resultaron con heridas de consideración y tuvieron que ser trasladadas para recibir atención médica.

Afortunadamente no había personas dentro del inmueble al momento del incidente, por lo que los daños se limitaron a una cama, mobiliario y algunos insumos de una tienda que también funciona en la vivienda, detalló la dueña del inmueble.

"Las motos se meten donde quieren y los buses tienen que esquivarlas para evitar accidentes”.Janeth Chillán, propietaria de la casa afectada

Luego de que el bus fue retirado del lugar por uniformados de la Agencia de Tránsito Municipal (ATM), representantes de la cooperativa de transporte llegaron para hacerse cargo de los gastos concernientes a la reparación del inmueble.

Una cuadrilla de obreros fue contratada con este propósito y se puso manos a la obra de inmediato. Sin embargo, la propietaria de la casa temía que por la extensión del daño, que abarcaba toda la fachada, el trabajo no culminara antes de que cayera el sol.

“Tienen que terminar hoy (ayer) por la tarde porque de noche se pone superpeligroso y si queda ese hueco abierto se me van a meter a la casa a llevarse las cosas”, advirtió preocupada la afectada.

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