La realidad supera a la ficción. Este dicho encaja perfectamente en un caso que ha dado la vuelta al mundo y se originó en Argelia, nación africana.

Se trata de la historia de Omar Bin Omran, quien desapareció en 1996 y luego de 28 años fue encontrado vivo. Sus parientes perdieron su rastro cuando salió de su casa hacia un centro de estudios. En aquel entonces, el país atravesaba un conflicto armado, por lo que su familia creyó que Omar fue uno de los muertos.

Sin embargo, algo les decía que continuaba con vida, por lo que buscaron en distintos lugares, pero nunca tuvieron una pista que los llevara a encontrarlo.

Medios locales recabaron datos de esta historia e informaron que su perro se mantuvo fiel y siempre iba a las afueras de la casa de un vecino para olfatear. Eso molestó al dueño de la propiedad y envenenó al animal.

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Para 2013, la madre de Omar sospechaba algo, pero ese año perdió la vida. No fue hasta este 2024 que un hermano del dueño de esa casa a la que el perro iba, denunció que Omar estaba vivo.

La familia del perdido puso la denuncia y entró a la vivienda. Y allí estaba el hombre desgarbado y con claros trastornos psicológicos. Su recuperación será larga.

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